El vecino y su esposa llamaron para pedir ayuda y nadie respondió a sus llamados. Foto: Imagen Ilustrativa
Un vecino del centro de la ciudad relató que el sábado a las 21 horas advirtió una situación de violencia en la vereda de su cuadra, protagonizada por una pareja que vive en el barrio. Según contó discutían con intensidad frente a sus hijos menores de edad, con golpes que no fueron de gravedad y una amenaza con cuchillo.
Al ver el episodio, el vecino decidió comunicarse al celular de la Guardia Urbana Municipal (GUM) al que ya había llamado en otras oportunidades pero nadie respondió, por lo que su esposa llamó al 911, mientras él decidió intervenir para frenar la pelea y tratar de resguardar a los chicos.
La persona que respondió al 911 no tuvo buena predisposición con el llamado. “Parecía que le estaba pidiendo una pizza” expresó el vecino criticando la pasividad de la telefonista, que llegó a decirle “que no la apuren porque ella estaba trabajando”.
Finalmente la discusión terminó y las partes se tranquilizaron sin que nadie llegue o intervenga en el hecho.
La policía nunca fue y la directora de la GUM Miriam Solís explicó que no estaban en funcionamiento. Informó que trabajan de 18 a 6 de la mañana los días hábiles, sábados de 00 a 6 A.M y domingo desde la medianoche hasta las 7 A.M. Aclaró que cuando no están de guardia, el celular de GUM queda apagado.
El 911 sigue sumando quejas a un año de que Arroyo Seco fue adherido a la central de emergencia de Villa Gobernador Gálvez.