El martes 15 de diciembre en horas de la noche se trasladaba en moto sobre el acceso con sentido hacia autopista, cuando repentinamente colisionó contra la pésima señalización que acompañaba la reparación de una obra dispuesta por la Municipalidad (Ver Aparte). Tras esta fuerte colisión, Cristián Pérez, sufrió un brutal golpe en su cabeza. A dos años de aquel fatídico momento, su hermana Karen confirma que él ya no sufre riesgo de vida y se recupera lenta pero progresivamente.
Luego de aquella noche, sin cobertura alguna y tras largos meses de trámites se conseguía que PAMI lo contemplara como afiliado a la Obra Social ya que sus padres son Jubilados; después de permanecer en el HECA, estuvo en PILARES y pasado algún tiempo se lograba su internación domiciliaria. Hoy Cristián Pérez tiene 41 años y su vida ya no corre riesgo alguno. Sin embargo sus cuidados son intensivos y se desconoce cuándo más le demandará su entera recuperación.
“Él ahora está mejor, ya no tiene traqueostomo, empezó a comer hace 15 días toda la comida procesada. El riesgo de vida pasó y ahora estamos en la etapa de rehabilitación”; comenzó a contar Karen su hermana que agregó que los avances son sumamente positivos siendo que los médicos consideran su caso como “un milagro”. Actualmente no maneja bien la parte izquierda de su cuerpo pero su parte derecha sí. Karen contó incluso que su perro, que lo esperó durante meses mientras estuvo ausente en su casa, fue quien también aportó mucho en su recuperación. El animal estaba acostumbrado a que Cristián juegue con él y después de tanto insistirle, finalmente logró que él comience a agarrar la pelota con la que habitualmente se entretiene y de esta manera que la lance y de alguna forma u otra lo ayude en recuperar parte de la movilidad. “Es increíble, su perro está las 24 horas con él acompañándolo”, comentó en charla con este medio.
Sobre su proceso de cuidado y recuperación, cabe mencionar que PAMI se sigue haciendo cargo de la internación domiciliaria, medicamentos y pañales. Concurre tres días a la semana al hospital local a rehabilitación, las enfermeras lo visitan tres veces al día, una médica clínica lo ve una vez a la semana al igual que la fonoaudióloga y otro kinesiólogo además del que lo asiste en el efector público.
Más adelante se espera que Cristián pueda comenzar a hablar. Por ahora solo resta esperar, se sabe que esto le llevará tiempo. Aunque lo está intentando. A su modo pero lo que se denota según Karen es que tiene ánimo para salir adelante. Reconoció que tuvo un período donde se lo notaba bajoneado pero ahora parece que ese estado quedó atrás.
Debido a que ya no pueden tenerlo en la casa de sus padres porque su mamá no está en condiciones de atenderlo ya que casi no puede caminar; decidieron trasladarlo a un hogar que está sobre calle Humberto Primo, frente a la Plaza San Martín donde recibe todo lo necesario. En este lugar comparte el tiempo con otras personas, está entretenido y cómodo; y por ello Karen se siente tranquila dado que sabe que está cuidado. Pese a esto y sin querer dejar brotar algunas lágrimas que sin embargo mojan sus ojos, admitió que tras el accidente “se quedó sin amigos” y nadie más fue a visitarlo. Dijo que ella no está enojada con nadie pero que, sobre todo por él, le gustaría que lo vayan a ver.
Demanda a la Municipalidad
Hacía apenas unos días que el intendente Nizar Esper asumía en funciones cuando se registró el accidente de Cristián. La obra con la que chocó estaba mal señalizada, no había balizas y el alumbrado público no estaba funcionando en esa zona esa noche. El combo fue determinante y todo hace entender que el Municipio tuvo y tiene sus responsabilidades al respecto.
Solo pensando en cómo ayudar a su hermano y sin considerar en ese momento necesario una demanda al estado; no se dejó llevar por el impulso y se mentalizó en lo verdaderamente importante que era y sigue siendo Cristián. Pero ahora ya pasado el tiempo, Karen Pérez decidió contratar los servicios de una abogada de Rosario para demandar a la Municipalidad de Arroyo Seco por tremenda irresponsabilidad.
Karen recordó con mucho dolor la respuesta de Nizar Esper tras su reclamo por lo ocurrido. Según ella, el Jefe Municipal le habría dicho: “Hacé lo que quieras total yo ya no voy a estar en el mando”; en contrapartida por si ellos consideraban que lo conveniente era hacer un juicio.
Crosio: Ayuda y ninguneo
El Dr. Luciano Crosio, mientras estaba al frente de la Oficina de Atención al Consumidor, fue quien ayudó a la familia de Cristián a elevar el Amparo para que PAMI lo tome como un afiliado más. Pasó el tiempo y hace unos dos meses y ya siendo concejal electo, Karen le pidió un favor. Le había llegado una intimación por multa de patente, la cual aparentemente estaba incorrectamente impartida. Ante estas circunstancias y no sabiendo qué hacer, decidió recurrir al abogado. “Me dio vuelta la cara y tengo el mensaje que me mandó. Me dijo que no se ocupaba más de estas cosas y le pregunté a quién me podía dirigir y ni me contestó”.