Es una de las iniciativas del vivero y huerta municipal, que funciona en la vieja usina, por calle Alvarado entre Humberto Primo y Avellaneda.
Por la gran cantidad de plantines de tomate decidieron ofrecerlos a cambios de un alimento no perecedero que será donado a distintas instituciones solidarias de nuestra ciudad.
En el lugar trabajan actualmente tres municipales bajo la dirección de la ingeniera agrónoma Renata Luna.
Entre todos lograron cambiar a un 100 por ciento el lugar que se encontraba en estado de abandono y que ahora tiene su espacio organizado en huerta y vivero con el mantenimiento necesario en cada área.
Para realizar el canje solidario se pueden acercar de lunes a viernes de 7.30 a 12.30 hs.
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