Después de la confirmación oficial de COVID positivo en el Secretario de Obras Públicas José Luis Murina y el coordinador de iluminación Roberto Paolini, trascendió esta mañana que un asesor y uno de los encargados que trabajan junto al médico también tendrían Coronavirus.
Pero según afirman los trascendidos, el problema en el corralón no son los casos confirmados, sino los sospechosos que deben aislarse de forma preventiva.
Así fue por ejemplo, que 10 albañiles que habían trabajado en la misma obra, debieron aislarse porque uno de ellos comenzó con síntomas febriles, y algo simlar ocurrió con los recoletores.
Los encargados esperan que la situación pueda normalizarse en los próximos días.