Delincuentes se alzaron con un millonario botín sin siquiera ingresar a la vivienda. Sucedió en la ciudad de Santa Fe
Una vecina del barrio René Favaloro de la ciudad de Santa Fe denunció un robo millonario en joyas del patio de su casa mientras la víctima estaba de vacaciones en Brasil.
La joven víctima de 19 años heredó hace seis años joyas de su abuela y de su bisabuela por un valor de unos 30 mil dólares.
Por seguridad, el pasado mes de octubre del 2024, las puso en un recipiente de plástico y las enterró en un cantero en el patio de su casa ubicada en San José al 10400, en el barrio René Favaloro de la ciudad de Santa Fe.
El 12 de enero del 2025 se fue de vacaciones a Brasil y al regresar el 30 de enero se encontró con que se las habían robado.
Quienes cometieron el robo solo cavaron en el lugar donde estaba escondido el balde en el cantero. No ingresaron a la vivienda.
La joven radicó la denuncia en la Comisaría 27° y el caso es investigado por la fiscal Rosana Peresín.
En la casa trabajaron los peritos de la Policía de Investigaciones en el levantamiento de pruebas. Por el momento, no hay personas identificadas ni detenidas en relación con el robo.
Por el momento, no se descarta ninguna hipótesis, mientras la policía intenta reconstruir los movimientos previos al hallazgo del botín por parte de los ladrones.
Cinco mujeres fueron demoradas al ser descubiertas con cocaína y marihuana ocultas en su calzado. Utilizaban un método sofisticado para burlar los controles. Algunas tienen vínculos con presos relacionados al narcotráfico.
El choque ocurrió pasadas las 22 cuando la víctima de 33 años caminaba por la zona de Avellaneda y colectora de Circunvalación y fue embestida por un Renault 9. El conductor se retiró del lugar y se presentó a la medianoche en dependencia policial.
El ataque ocurrió el sábado en un asentamiento ubicado en Crespo y Granadero a caballo. La víctima fue trasladada al hospital de niños Zona Norte de Rosario
El robo tuvo lugar el pasado sábado en las afueras de Rosario. Los delincuentes se llevaron celulares, dinero, una computadora, una consola de videojuegos y el DVR de las cámaras de seguridad.
Tras el crimen, la policía allanó un bunker al que habrían ido las víctimas y arrestó a cuatro sospechosos. La pareja de uno de los fallecidos declaró que los agresores le dijeron que fue una venganza