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En el décimo operativo de control integral realizado por la Municipalidad en la zona noroeste, cerraron un comercio en Wilde y Mendoza que funcionaba sin permiso y vendía medicamentos. Remitieron al corralón 30 motos y dos remises ilegales
La Municipalidad de Rosario llevó adelante este miércoles un nuevo operativo integral, esta vez en el jurisdicción del Distrito Noroeste, precisamente en el sector comprendido por las calles Navarro, Wilde, Urquiza y colectora de Circunvalación, en el barrio Fisherton.
Como saldo, retiraron 10 autos abandonados en la vía pública, en tanto 30 motos fueron remitidas al corralón, al igual que dos remises ilegales.
Asimismo, realizaron inspecciones en diversos comercios y como resultado se procedió a la clausura de un supermercado ubicado en Wilde y Urquiza. El local carecía de la habilitación municipal correspondiente para funcionar. Al mismo tiempo se secuestraron medicamentos que eran comercializados en el lugar.
Del mismo modo, personal del Área de Servicios Urbanos (ASU) del Distrito Noroeste se encargó del mejoramiento del entorno, para favorecer las condiciones de convivencia en los espacios públicos del barrio. Las cuadrillas, a su vez, también realizaron la reposición de cruce peatonal sobre drenaje a cielo abierto, rectificación de zanjas y limpieza y ejecutaron tareas de desobstrucción de zanjas y de limpieza de las plazas ubicadas en Navarro al 7000 (lindera con la vecinal Antártida Argentina) y en Urquiza y Juez Subiría.
A estas acciones, se suman las intervenciones que desde el viernes que realizan en las calles comprendidas entre Colombres, Navarro, Urquiza y colectora, a través de cooperativas de trabajo, coordinadas desde el ASU, respecto a zanjeo, rectificación de zanja y zanja nueva.
Además, se realizaron distintas tareas para optimizar la iluminación en la zona, con trabajos de poda y escamonda y despeje de luminarias a cargo del Centro de Operaciones de Emergencias municipal en varias arterias de la zona.
Estas intervenciones, que se repiten todas las semanas en distintos barrios, “tienen como propósito la supervisión de habilitaciones y condiciones higiénicas de los comercios, el retiro de vehículos abandonados y el control de documentación, el mejoramiento del entorno para favorecer las condiciones de convivencia, y el control de elementos de seguridad de quienes transitan en moto”, según explicó la Secretaría de Gobierno en un comunicado.
