Los padres de la mujer desaparecida concedieron una entrevista a Oscar González Oro, quien al aire les avisó que su hija había llamado para pedirles que aborten la búsqueda. Para Alberto Perassi, era "carne podrida". "Sé de dónde viene", sostuvo en Radio 2
Con el título, “Pueblo chico, infierno grande. Hija, ¿dónde estás?”, Oscar González Oro presentó este martes en su programa que se emite por América, a Alberto y Alicia Perassi, los padres de Paula, la mujer desaparecida en San Lorenzo en septiembre de 2011. El periodista entrevistó al matrimonio, quienes prometieron regresar al día siguiente. Nunca pensaron que, después de más de dos años y medio de buscarla sin éxito, la producción de “Los unos y los otros” iba a lograr lo que ellos nunca consiguieron: una supuesta llamada de la propia Paula. “Soy Paula, no me busquen más”, habría dicho, según les informó al aire el conductor. “Fue como un balde de agua fría”, contó Alberto, que con todo, no pierde la esperanza.
En diálogo con Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra por Radio 2, el papá de Paula aclaró que se enteró del llamado en vivo y que no le gustó “de ninguna manera”. “Porque se de dónde viene”, añadió. En su opinión, quien llamó no era Paula sino alguien que no quiere que se avance en su causa, probablemente los mismos que desde que él empezó a buscarla lo han convertido en blanco de ataques intimidatorios.
Recordó que en varias oportunidades ingresaron en su casa a revolverlo todo y a hacer daño. Contó que en una ocasión le robaron el equipo que utiliza para buscar a Paula.
Con todo, Alberto reconoció que, aunque piensa que el supuesto llamado fue “carne podrida”, no puede dejar de pensar en la posibilidad de que sea verdad. “Si realmente es así, si realmente era ella, que de una señal de vida”, pidió.
En cuanto al estado de la causa judicial, advirtió que “se encuentra muy lejos de resolverse y muy cerca de la impunidad”. Sostuvo que detrás de ello “hay gente importante” que no quiere que la verdad salga a la luz y volvió a apuntar contra la esposa de Gabriel S., ex amante de Paula y principal sospechoso de su desaparición.
El 18 de septiembre de 2011, Paula, con 34 años y embarazada supuestamente de Gabriel, dejó la casa que compartía con su esposo y sus dos niños. Hacía tiempo que estaba separada y según se supo estaba enamorada del empresario, un hombre casado de 41 años, conocido de la familia y quien la habría obligado a practicarse un aborto.