Se dispuso un vallado que filtró el acceso al Patio Cívico y se ejecutaron minuciosas requisas, incluso a funcionarios. Fuerte presencia de fuerzas provinciales y federales que se desplegaron en las inmediaciones.
Un intenso despliegue de fuerzas de seguridad tuvo lugar durante la mañana, en el marco de la acto por el Día de la Bandera, debido a la presencia de Mauricio Macri. La posibilidad de escraches o ataques contra el presidente promovió el resfuerzo de la presencia policial provincial y federal en las inmediaciones, dándole a la jornada una tonalidad diferente a la de otros años. También se recurrió a la instalación de un vallado que limitó el acceso al Patio Cívico e inclusive se realizaron cacheos y se revisaron los bolsos hasta de los mismos funcionarios invitados.
La posibilidad de manifestaciones contra Macri llevó al gobierno nacional a redoblar la apuesta en materia de seguridad. En principio, se instaló un vallado que impedía a la población acercarce al Patio Cívico del Monumento, lugar donde se realizó la promesa a la bandera con la presencia de Macri.
A las vallas se le sumó una fuerte presencia de integrantes de la Policía Federal y Gendarmería que armas en mano se ubicaron en la zona, generando un impacto ante el infrecuente despliegue. En tanto, se efectuaron requisa y controles a las personas sobre sus pertenencias. Así, se revisaron bolsos y carteras, incluso de los mismos funcionarios que formaban parte del protocolo.
El incidente ocurrió en el Instituto Comercial Rancagua. Una alumna de 10 años está en grave estado tras recibir el impacto directo en el rostro. Debieron trasladarla al Hospital Garrahan en helicóptero.
Unas 250 mil personas, según cifras oficiales, se concentraron para el show por el Día de Rosario, que en esta ocasión celebra 300 años. Operativo de tránsito y seguridad en la zona, con casi 200 agentes.