Un nutrido grupo se concentró en la Plaza de la Constitución. Al problema de salud colectivo, se sumaron accidentes viales, alguno fatal
Mientras bomberos y brigadistas trabajaban en las islas para sofocar el fuego intenso que viene azotando a Villa Constitución, la ciudad, cansada de humo y de sonar como campana de palo, decidió juntarse en un reclamo urgente. Un grupo nutrido de vecinos se convocó este martes en la Plaza de la Constitución para manifestar su hartazgo por lo que vienen sufriendo "desde hace años", pero que recrudeció los últimos días, con la inusitada invasión de humo desde las islas entrerrianas. Es que esta vez, la cortina gris que cubrió la ciudad se hizo demasiado insoportable, y hasta llegó a la ruta, donde la pérdida de la visibilidad terminó incluso en accidentes.
De eso se habló durante el encuentro, donde fueron "muchos, aunque tendríamos que haber sido más", como dijo uno de los autoconvocados.
La concentración tuvo un verdadero espíritu de asamblea, donde se ofreció y se le dio el micrófono a cualquier vecino que quisiera expresarse.
Así, un hombre que se identificó como propietario de la firma Transpreb, tomó la palabra y recordó que hubo tres accidentes cerca de la ciudad a causa del humo. "Uno de nuestros camiones fue atropellado de atrás por otro que trasladaba piedras; los otros días se mató una persona que venía por autopista, también detrás de un camión y sin visibilidad. Nosotros no tendríamos que estar involucrados, pero las autoridades tienen que hacerse cargo del tema. Vivo enfrente de la bajada de cabotaje y vivo encerrado. Hoy (por ayer), a las 9 de la mañana, no podíamos salir a tomar un poco de aire. Algo tenemos que hacer, no sé qué, pero no podemos seguir viviendo de esta manera".
Un ama de casa que trabajó durante 25 años en la sanidad pidió la palabra y calificó como "un asco", lo que está ocurriendo en la ciudad y la región como consecuencia de los incendios. "No les importan los niños, ni los ancianos, ni la gente, están enfermando a la ciudad. Si el intendente dice que no le dieron bolilla, que vayan todos los gobernantes, nosotros les pagamos el pasaje", ironizó.
Matías Tomasi, uno de los organizadores, recordó que "desde hace años venimos sufriendo este desastre, la destrucción del ecosistema y la destrucción de nuestra salud. Hemos hablado incontables veces con nuestros representantes para que tomen cartas en el asunto, utilicen las herramientas necesarias para frenar esta cuestión, hemos tenido un montón de reuniones sin resultados. Ahora el problema se agrava, porque en los últimos días no solamente sufrimos el humo, sino la pérdida de vidas por los accidentes".
El joven advirtió que "esto no lo podemos tolerar más, tenemos que decir basta definitivamente. Tenemos el antecedente de lo que sufríamos con el basural, que se incendiaba diariamente. La solución la encontramos denunciando a los que eran solidariamente responsables. Aquí tendríamos que hacer lo mismo, denunciar a todos los funcionarios públicos, desde el presidente de la Nación, el ministro de Medio Ambiente, y así sucesivamente con todos los que tienen responsabilidad de que esto pase".
Otra vecina tomó el micrófono, contó que tiene problemas de vista y narró cómo está viviendo en carne propia las quemas.
Se escuchó hablar de complicidades, de que los responsables políticos "están fomentando la destrucción y los grandes negocios, representan los intereses económicos y no los del pueblo".
Uno de los que habló desde la política fue el concejal Víctor Secreto, del Frente Soberanía Popular: "Hemos trabajado desde nuestro lugar para ver qué podíamos hacer, y nos dimos cuenta de que tenemos pocas herramientas; lo que va a resolver los problemas es la unidad de la gente. Si la plaza está llena, es un paso gigante. No crean que no repercute, sí repercute, sí les interesa, como les interesa si salimos a marchar, a caminar; es necesaria una acción colectiva", razonó el representante.
Entre otros, habló una comerciante que propuso una nueva asamblea, pero esta vez convocando a todo el arco político para pedirle que actúe y expresarle que tiene, de hacerlo, el apoyo de la gente. Un ambientalista advirtió que las quemas no son solamente negocio para los dueños de los terrenos, sino también para las empresas hidrantes que "incrementaron sus presupuestos en un 800 por ciento". Se cerró el acto con un resumen de las propuestas y se marchó al municipio al grito de "basta de humo".
La impresión que dejó la concentración, y así se lo expresó después Secreto a La Capital, es que fue una convocatoria heterogénea, que no fueron "los mismos de siempre", sino que hubo un compromiso de vecinos de distintos ámbitos.
Ahora, y tal como lo propuso una mujer que hizo uso de la palabra, la intención es convocar a otra concentración el sábado, invitando ahora a quienes tienen mayor responsabilidad en la toma de decisiones y en la posibilidad de ejercer alguna presión, a las agrupaciones políticas y gremiales de la ciudad y la zona.