Después de dos meses del implante con células madres en Beijing, la familia comienza a notar algunos cambios en ella aunque todavía faltan más avances. El balance hasta el momento es positivo.
La charla comenzó con mate de por medio mientras Sofi dormía. Carolina y Marcelo Degano comentaron algunos de los cambios que ya son notorios en la nena de 2 años. A primera vista, se ve que aumentó de peso y de altura. Cuando partió hacia China en el mes de agosto pesaba unos 8 kilos y medio, hoy pesa 10 kilos y medio. Su estatura era de 75 centímetros y ahora mide 83. Otro de los cambios es que le creció la cabecita unos 2 centímetros y sonríe todo el tiempo, incluso a carcajadas en varias ocasiones.
Actualmente esta en rehabilitación, “tiene todos los días kinesiología. Tiene tres veces terapia ocupacional, dos veces fonoaudiología, y estimulación visual que viene una vez al mes”, dijo Carolina. Mientras que continúa medicada con tres anticonvulsivos “más el que es para la enfermedad de Adison y la medicación que nos trajimos de allá que son nueve. En total toma trece”.
Sofía que en principio la conocimos por su Síndrome de West, aparentemente según le informó la neuróloga a la familia, “ya no está más” pero sí padece encefalopatía crónica no evolutiva, la enfermedad de Adison y un problemita en el corazón. Estos dos últimos le fueron descubiertos en el Hospital de China.
Otra de las novedades, que pone felices a los papás de la princesa Sofía, es que “le hicimos un encefalograma y no se registró epilepsia y ella desde que llegamos de China prácticamente no tuvo convulsiones y por eso salió bien el estudio. Ahora hay que esperar unos 4 meses, volver a repetir y si no sale epilepsia tal vez le modifican la medicación o se la suspenden” y que si bien los cambios en ella son notables; esperan con ansiedad ver más avances a nivel neurológico.
Pero por lo pronto están felices porque la ven mucho mejor y las expectativas de que pueda seguir teniendo una buena calidad de vida se renuevan todos los días.
Por otra parte, no se descarta que se tenga que realizar un nuevo viaje a China. Todo depende de los estudios que se vaya realizando pero por lo pronto la evaluación que hicieron los médicos de Beijing es que estaba todo bien y que las células madres le estaban haciendo el efecto esperado.
Sofía despertó después de la entrevista, estaba sonriente tal cual la describieron sus papás. La alegría se veía en su rostro al igual que en el de su hermanita Victoria.