Esta tarde cerca de las 19 horas un grupo de unas 100 personas se manifestó por las calles pidiendo justicia tras el caso de Jonathan Schonfield.
Participaron familiares amigos, vecinos y funcionarios municipales.
Partieron desde la esquina de Libertad y 1° de Mayo donde ocurrió la agresión policial el viernes por la noche y se dirigieron a la base del Comando Radioeléctrico.
Allí fueron atendidos por el jefe de la fuerza subcomisario Marcelo Aranda quien se mostró dispuesto a dialogar pero el cruce tuvo momentos de tensión e incluso la mamá de Jonathan debió sentarse y tomar agua tras una situación de angustia.
Los manifestantes exigieron el esclarecimiento del hecho y que el agente cuestionado no salga a la calle por lo menos, ya que se encuentra en funciones desde el conflictivo episodio.