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El caso de Hugo Yeoman, ex Coordinador del Centro de Monitoreo Municipal, continúa generando controversia. Yeoman fue apartado de su rol en marzo de este año tras un escandaloso robo al supermercado "El Ángel", ubicado sobre el acceso autopista, que no se previno a tiempo, a pesar de estar registrado por las cámaras municipales. Ahora, su esposa, Mónica Grotte, resulta incorporada como empleada en la nueva Central del 103, lo que genera sospechas de favoritismo y manejos políticos en la intendencia de Daniel Tonelli.
Pero rememorando algo de lo ocurrido y el por qué Hugo Yeoman termina apartado del cargo, nos remonta a lo sucedido el domingo 17 de marzo, alrededor de las 4 de la mañana, cuando dos individuos a bordo de una camioneta forzaron la entrada del supermercado "El Ángel" y procedieron a saquear el establecimiento. Sorprendentemente, ni la policía ni las fuerzas de seguridad municipales detectaron el robo, que ocurrió frente a una cámara municipal que grabó todo el incidente. La alerta fue dada por un joven que regresaba del boliche Mikha, y las imágenes del robo se difundieron rápidamente en las redes sociales, evidenciando la falta de eficiencia en el servicio de monitoreo.
Hugo Yeoman, quien había destacado en entrevistas anteriores la importancia de las cámaras como herramientas de prevención, fue señalado directamente por la incapacidad de su equipo para detectar el robo en tiempo real; y ante la presión mediática y pública, la intendencia encabezada por Daniel Tonelli ordenó una investigación sumaria para evaluar el desempeño de los operadores y supervisores del sistema de cámaras. Mientras se aclaraba la situación, Yeoman fue apartado de sus funciones y se le concedió una licencia con goce de sueldo, a la espera del dictamen final. Sin embargo, en ese lapso de semanas, se le pidió desde la municipalidad que dé un paso al costado.
En tanto, desde abril, Agustín Castriccini, un militante político de la agrupación Progresar que trabajó para Cristian Rojas y luego para el intendente Daniel Tonelli, reemplaza a Yeoman como Coordinador del Centro de Monitoreo.
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Pero ahora, la situación toma un giro aún más polémico, ya que esta semana se confirmó que Mónica Grotte, esposa de Hugo Yeoman, será incorporada como empleada en la nueva Central del 103 que, hasta donde se sabe, estará a cargo de la ex jefa de Tránsito María Báez. Este nuevo centro pretende centralizar todas las llamadas de emergencia, coordinando con diversas fuerzas de seguridad y servicios. de emergencia; inclusive las comunicaciones que estén vinculadas al área de Monitoreo, también se recepcionarán en esta línea y mantendrán un trabajo coordinado que es en definitiva lo que se busca en pos de mejorar la seguridad. La contratación de Grotte es vista como una maniobra para mantener a la familia Yeoman dentro de la administración municipal, a pesar del escándalo que llevó a la presentación de su dimisión.
Este caso pone de manifiesto la forma en que la administración de Tonelli maneja los recursos humanos y la selección de personal. Desde su asunción, el intendente ha sido fuertemente criticado por tomar decisiones a dedo, sin seguir los procedimientos establecidos de concursos públicos para la contratación. La inclusión de Mónica Grotte en la Central del 103 intensifica estas críticas, sugiriendo que los favoritismos y las lealtades políticas prevalecen sobre la meritocracia y la eficiencia en la administración pública.
La situación de Hugo Yeoman y su esposa Mónica Grotte evidencia las complejidades y desafíos en la gestión de la seguridad y los recursos humanos en la administración municipal. La controversia en torno a sus nombramientos y destituciones plantea preguntas sobre la transparencia y la responsabilidad en el gobierno local.
