Argentina goleó a Paraguay y tiene su pasaje al Mundial

Más allá del desequilibrio entre el ataque y la defensa, que será una preocupación a futuro, Argentina tuvo la noche esperada en el siempre complicado Defensores del Chaco de Asunción. Con la contundencia de una ofensiva que brilló, vapuleó por 5-2 a Paraguay y se aseguró el pasaje a Brasil 2014 cuando aún restan dos fechas para el cierre de las Eliminatorias sudamericanas. Messi, en dos ocasiones,el Kun Agüero, Ángel Di María y Maxi Rodríguez se lucieron con su aporte a fuerza de goles.

Ambos conjuntos entregaron un primer tiempo atractivo. En ese contexto, el equipo de Alejandro Sabella mostró dos caras: ritmo, efectividad, contundencia y capacidad entre los delanteros y muchas dudas y permeabilidad en el fondo.

Y en esa diferencia que logró con los de adelante, se destacó el rosarino Di María. De hecho, Angelito inició a los 11´ la maniobra en la que Roberto Fernández derribó en el área al Kun Agüero y le permitió a Lionel Messi conseguir una ventaja tempranera en suelo guaraní. El crack del Barcelona definió abajo y engañó al arquero, que fue hacia el otro palo.

De todos modos, el trámite se equilibró en poco tiempo. Sólo seis minutos después, el combinado albiceleste dio ventajas atrás. Así, Samudio sacó el centro que Núñez apenas tocó, pero que fue suficiente para superar a la endeble marca de Coloccini y a la floja reacción de Romero, justamente uno de los que se juega su consideración en un puesto aún discutido.

El 1-1 parcial en 16’ de la etapa inicial fue la evidencia del buen partido que se armó. Y Argentina, rumbo al Mundial, entusiasma con las variantes y el talento que tiene en el ataque, con Di María, Messi, Palacio y Agüero. E Higuaín, claro está, ausente esta jornada por una suspensión.

A pesar de que el chileno Ossés –de irregular desempeño- anuló un tanto argentino a los 21’, la contundencia de Agüero fue suficiente para acrecentar las chances de celebrar la clasificación. Tras controlar un pase de Messi, el Kun cambió el ritmo y metió un zurdazo cruzado para gritar el 2-1 con el que se fueron al entretiempo.

Tras el descanso, el inicio del complemento fue letal para la selección argentina. Fue allí cuando consiguió una distancia inalcanzable para su rival de turno, que lució vencido y con la desazón de saber que deberá aguardar otros cuatro años para luchar por acceder a la máxima competencia de la FIFA. Sin dudas, muy lejos de aquél equipo que construyó Martino y que hizo ruido en el continente y en Sudáfrica en 2010.

Con apenas cuatro minutos de juego, Gago –de gran nivel- le dio un pase magistral a Di María y el rosarino, tras una carrera inmensa, definió con precisión para celebrar el 3-1. Sin dudas, tuvo su premio a la entrega absoluta que se combina con su categoría.

Lo de Argentina, si bien se mostró sólido de mitad de cancha hacia adelante, fue la efectividad y no la cantidad de situaciones. Tuvo buenos intérpretes y aciertos en las decisiones. Y aunque Ossés le regaló el segundo penal de la noche, nadie podrá negar la superioridad que Messi trasladó al resultado con el 4-1 que puso tras cruzar con fuerza la nueva chance que tuvo desde los doce pasos.

Con cinco minutos por jugar, Santa Cruz cerró una maniobra en la que Zabaleta quedó relegado para descontar y poner el 4-2. Sin embargo, faltaba el broche de oro: la pared y la definición de Maxi Rodríguez, que había ingresado un rato antes, para sentenciar el 5-2 definitivo.

Con el pitazo final, Alejandro Sabella cerró el puño y todo el plantel se fundió en un abrazo en el centro del campo de juego de Asunción. Es que, más allá de que aún quedan por delante los compromisos con Perú y Uruguay a mediados de octubre, la noche entregó la postal más esperada en cuatro años. Fue el grito por tener la certeza de que la selección nacional dará pelea en Brasil en el 2014.