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¿Por qué se regala la prenda en Navidad? El interrogante encuentra distintas respuestas. Incluso no hay acuerdo sobre cuándo estrenarla. Uno poco de luz en torno al mito
Las hay de todos tamaños y más o menos sexys. Están quienes las estrenan en Nochebuena y quienes esperan hasta la llegada del Nuevo Año. Y, están también las que resisten culaquier forma de ritual. Lo cierto es que la costumbre de regalar esa prenda íntima para Navidad tiene tanta historia como marketing.
Algunas pistas para no perderese en el mar de vesiones coinciden en que es importante que la prenda la regale otra mujer y en lo posible, que guarde algún parentesco con la persona que la recibe.
El otro dato, aunque aquí hay algunas diferencias, es que la bombacha rosa se estrena en la noche de Año Nuevo.
Pero, ¿por qué rosa y no verde? Por un lado, es el color de la vela que prendían los creyentes el tercer domingo de Adviento para manifestar la alegría que representaba la llegada de jesús
Otros atribuyen el rosa a ciertas prácticas de la Europa contemporánea. Por ejemplo, en ciertos festejos de la Belle Epoque la consigna era vestirse para la Navidad con el citado color, incluyendo la lencería.
La prenda, por su parte, guarda relación con un ritual pagano ligado a la fertilidad y la procreación. Quien usa la bombacha rosa, aleja cualquier presagio negativo.
El otro dato en discusión es cuándo estrenarla. Pese a que no resulta muy cómodo cambiar de bombacha con la llegada de la Navidad, más si se piensa en un festejo poblado de mujeres, algunas la ponen en uso ni bien la sacan del paquete.
Sin embargo, la tradición reza que lo conveniente es estrenarla con la llegada del Año Nuevo porque, de este modo se asegura prosperidad para el próximo tiempo.
Es tendencia entre mujeres de clase media y con educación superior. Sus partidarios aseguran que es más saludable para los niños, pero los críticos lo ven como otra forma.
Un nuevo estudio acarrea conclusiones que preocupan: el humo de segunda mano puede afectar al bebé de una futura mamá incluso antes de que ella quedara embarazada.
El estudio fue realizado en 15 países de Europa y América y asegura que el mismo porcentaje de mujeres no dejaría a sus parejas en esa situación. El sondeo determinó, además, que cerca de un 40% de los hombres nunca tuvo una relación con una persona con exceso de peso.
