El trágico accidente ocurrió el viernes en la localidad de Loncopué. Personal de tres hospitales participaron en el intento desesperado por salvar su vida
La comunidad de Loncopué, Neuquén, se encuentra consternada tras el trágico fallecimiento de Thiago Ismael Jara, un niño de dos años que murió a causa de asfixia por la ingesta de un caramelo, un suceso devastador que ha causado profunda tristeza en su familia
El triste episodio ocurrió el viernes y fue informado por la Municipalidad de Loncopué. Fue antes de las 21 horas que el niño fue hospitalizado de urgencia debido a una asfixia causada por un caramelo atascado en sus vías respiratorias. La ingesta habría sido accidental.
Según el medio local LMNeuquén, Thiago fue asistido inicialmente en el Hospital de Loncopué y, dada la gravedad de su cuadro clínico, se decidió trasladarlo al Hospital de Zapala.
Sin embargo, en el trayecto, su estado de salud se agravó, lo que llevó a ingresarlo de emergencia en el Hospital de Las Lajas. Finalmente, fue derivado a Zapala, donde lamentablemente se constató su muerte por asfixia con cuerpo extraño.
Profesionales de los tres hospitales —enfermeros, médicos y un pediatra-neonatólogo— participaron en el intento desesperado por salvar su vida.
Debido a la complejidad de la situación y la urgencia del traslado, se requirió la presencia de efectivos de la Comisaría 26 de Loncopué, quienes activaron el protocolo de rigor para asegurar la vía y optimizar la evacuación del menor desde la localidad hacia Zapala.
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