La autopsia realizada sobre el cadáver de Roberto Aníbal, el testigo de identidad reservada cuya casa explotó y se incendió el miércoles en Moreno, confirmó que murió como consecuencia de las complicaciones que le generaron las quemaduras.
El estudio de autopsia, realizado durante las últimas horas por los peritos forenses de la Morgue Judicial de Lomas de Zamora, confirmó que Aníbal murió como consecuencia de las complicaciones que le generaron las quemaduras que sufrió en el 80 por ciento del cuerpo y no por otra causa, informaron hoy fuentes de la investigación.
De acuerdo a los voceros consultados, los médicos forenses ya le adelantaron al fiscal de Moreno que entiende en la causa, Federico Luppi, que la víctima no presentaba lesiones de defensa, golpes, puñaladas ni balazos.
Luppi esperaba ese resultado para poder descartar que la explosión e incendio posterior de la casa de Aníbal hayan sido provocados intencionalmente por un tercero para tapar una mecánica de muerte de tipo criminal.
Luppi ya había expresado ayer a la prensa que la hipótesis principal que manejan los investigadores del caso es la "accidental", según la cual el siniestro ocurrió por una fuga de gas de una garrafa en combinación con el chispazo provocado por un cargador universal de celulares.
Aníbal (40) era un testigo de identidad reservada de la causa por el crimen de la niña Candela Rodríguez, asesinada en 2011 en la localidad bonaerense de Hurlingham.
Este hombre tenía custodia de la policía bonaerense porque gracias a su testimonio se detuvo a los principales sospechosos del crimen de la niña y poco antes de la explosión los efectivos que estaban a cargo de su cuidado habían pasado por la vivienda para ver cómo se encontraba.
La explosión ocurrió cerca de las 3 de del miércoles último, en una casa situada en Virgen de Luján y Santos Dumont, de Moreno, en el oeste del conurbano, donde Aníbal, que trabajaba como carnicero, se encontraba solo.
De acuerdo a los investigadores, tras la explosión el testigo salió envuelto en llamas de la vivienda y alcanzó a decir "agua", "auxilio" y "no me dejen morir".
Tras ser rescatada, la víctima fue trasladada en gravísimo estado al Hospital Luciano de la Vega de Moreno, donde los médicos constataron que presentaba quemaduras en el 80 por ciento de su cuerpo que le produjeron la muerte horas después.
El caso tiene la particularidad de que el agresor es prácticamente ciego. Ocurrió en una vivienda de pasillo en el asentamiento de Liniers y Tupac Amaru antes del amanecer de este sábado. La escena estaba repleta de botellas de alcohol. El agresor se entregó y la Policía secuestró el arma homicida
El primer ataque se produjo el jueves por la noche contra la institución ubicada en Felipe Moré al 2200. El segundo hecho ocurrió en Constitución al 3200, donde está el establecimiento educativo "Gendarmería Nacional".
No hay indicios de amenaza contra su dueña, una vecina del barrio Vía Honda. Al momento la investigación no relaciona el hecho con los coches quemados días atrás
El siniestro vial ocurrió en el atardecer de este martes en Garay y Larrea. El móvil policial iba a un operativo y circulaba a alta velocidad, según vecinos. Una agente fue derivada para atención médica, fuera de peligro.