No localizan a los autores de una tremenda paliza a un ladrón que está muy grave

Rosario.- Los investigadores policiales y judiciales no lograron todavía determinar quiénes fueron los autores de la tremenda golpiza que sufrió David M. luego de que el sábado pasado asaltara, junto con un cómplice que logró escapar, a una muchacha de 21 años que caminaba con su pequeña hija cerca de su casa del barrio Azcuénaga, en la zona oeste de la ciudad. Al cierre de esta edición, el joven de 18 años permanecía internado en grave estado en terapia intensiva del Hospital de Emergencias Clemente Alvarez.

En el marco de la pesquisa, el fiscal de Homicidios Dolosos Florentino Malaponte dispuso que la investigación de la golpiza propinada a David M. esté a cargo de la División Judiciales de la policía rosarina. En ese marco ordenó algunas medidas como buscar testigos que hayan presenciado el suceso, tomarle declaraciones a los efectivos del Comando Radioeléctrico y a los padres del joven que recibió la paliza.

Arrebato. David M. fue golpeado luego de un atraco ocurrido el sábado alrededor de las 20 del sábado, cuando Agustina M. caminaba por la cortada Marcos Paz al 5400 en dirección a su casa y llevaba en brazos a su hijita de 2 años. En ese momento, según los voceros consultados, aparecieron en escena dos jóvenes en una moto Guerrero roja de 125 centímetros cúbicos.

Al toparse con la joven madre el que iba en el asiento del acompañante le arrebató el bolso. Con el botín en su poder los ladrones emprendieron el escape mientras la mujer gritaba clamando por ayuda. El atraco es investigado por la Fiscalía de Investigación y Juicio. Entre las pruebas está la moto en la que iban los sospechosos, que fue incautada en el lugar del hecho.

Golpes. Pero los maleantes apenas pudieron recorrer unos metros en su huida. De inmediato aparecieron varios vecinos a cortarles el paso. En este sentido, ayer no se había confirmado si el conductor de algún vehículo los había embestido para hacerlos caer de la moto o si fueron los vecinos quienes lo hicieron al abalanzarse sobre el rodado.

Lo cierto es que uno de los ladrones alcanzó a incorporarse y pudo escapar corriendo con un bolso de la chica —según versiones periodísticas, no llevaba más que pañales— pero su cómplice no tuvo la misma suerte. Así, David M. quedó en la vereda a merced de los enardecidos vecinos.

Según las fuentes consultadas, el joven recibió golpes de puño, algunos en la cabeza, y así quedó tendido en la calle hasta que un patrullero del Comando Radioeléctrico acudió a la escena del suceso y llevó al frustrado ladrón al Heca. "Hasta ahora no hemos individualizado a quiénes golpearon al muchacho que cometió el robo", comentó ayer una fuente vinculada con el caso.

Al parecer, la pesquisa de los investigadores tropiezan con una dificultad por la gran cantidad de personas que intervinieron en el episodio. "Cada uno que venía le pegaba al pibe", dijo un testigo.

Grave. Lo concreto es que anoche David M. continuaba en grave estado en el Heca, donde fue operado a raíz de un fuerte traumatismo de cráneo y al cierre de esta edición permanecía internado en la sala de terapia intensiva. "Tuvo pérdida de masa encefálica", dijo un portavoz consultado por este diario.