Joel "Chavo" Fernández fue la primera persona que se autoincriminó, asegurando que se dio muerte a Melina Romero luego de una fiesta de sexo, drogas y alcohol en una casa de Pablo Podestá. Tras ello, se detuvo al dueño de ese inmueble, Javier "Pelado" Rodríguez, de 44 años, y a los jóvenes "Toto" y Elías "Narigón" Fernández.
Sin embargo, ahora la Justicia asegura que los hechos sucedieron en la casa de "Toto", por lo que deberá expedirse respecto de la situación procesal de Rodríguez.
"Toto" siempre declaró ante la Justicia que la noche de la desaparición de la joven él estuvo en su domicilio, pero con amigos, y en ningún momento fue parte de alguna fiesta. Sin embargo, la declaración de otra testigo, Melody, lo indicó como la persona que aportó la casa para que tuviera lugar ese encuentro entre excesos y sexo.
Melody aseguró haber participado de esa fiesta, y declaró que antes no se presentó a brindar declaración por el hecho ya que se sentía "amenazada" para no relatar los pormenores de lo vivido. Según aclaró, ella no corrió la misma suerte que Melina "porque soy amiga de los chicos".
La jueza de Garantías del Joven de San Martín, María Eugenia Arbeleche, había dictado el pasado viernes la falta de mérito del joven Fernando, de 17 años, por falta de pruebas y ordenó su libertad. Éste fue el joven que se puede ver en las cámaras de seguridad del boliche besando a Melina antes de entrar al local.
Sin embargo, aún continúa la búsqueda de otra de las personas involucradas en el hecho, quien manejaba el vehículo en el que se llevó el cuerpo sin vida de Melina, en dos bolsas de nylon, todo según el relato de Melody.
Rubén Romero pidió por más seguridad: "No quiero que quede nada impune", sentenció.
Fuentes de la investigación confirmaron que el cuerpo hallado en un predio del Ceamse es el de la joven desaparecida el 23 de agosto. La Policía Bonaerense fue alertada del hallazgo por un llamado al 911