Walter Bóveda, de 52 años, estaba borracho y tomó por la fuerza a una chica de 15 años aprovechando que su padre se había retirado. La pena de seis meses de prisión que recibió podría quedar en suspenso.
Se trata de Walter René Bóveda, de 52 años, a quien el juez en lo correccional de La Plata, Eduardo Esquenazi, le fijó esa pena que quedará en suspenso si el hombre "establece residencia con control del patronato de liberados, concurriendo trimestralmente" y si se abstiene "del consumo de bebidas alcohólicas y de tener todo tipo de contacto con la víctima".
El hecho que motivó esta condena ocurrió la noche del 10 de marzo de 2014, en una despensa de la localidad de Saladillo, cuando una adolescente de 15 años, hija del propietario, atendía el local.
Bóveda compró dos botellas de cerveza y cuando la menor le entregó el vuelto de su pago, el hombre sorpresivamente la tomó del brazo y le besó la mano por la fuerza, tironeando a la adolescente hacia su cuerpo, a la vez que le decía que "debería haber sido la reina de Saladillo".
El juez tuvo en cuenta para aplicar la pena el testimonio de la menor que destacó que al momento del hecho estaba sola porque su padre se había retirado un momento y que al ingresar el imputado a la despensa percibió su aliento etílico.
"Al perpetrarse el hecho delictivo se afectó la integridad sexual de la víctima y le generó un cuadro de llanto y angustia", destaca el fallo.
La defensa de Bóveda argumentó que el gesto de besarle la mano fue "un trato de reverencia" lo que fue calificado por el magistrado como "inconsistente" ya que "nadie reverencia a una mujer valiéndose de su fuerza para retenerla, por el contrario, frases como las exteriorizadas para cometer el hecho, decir que la menor debería haber sido reina de belleza, al tiempo que la besa, denotan el fin libidinoso perseguido".
Como atenuantes se tuvo en cuenta "el estado de ebriedad del imputado, que redujo su capacidad de reflexión al momento de cometer el hecho, y que los besos fueron ejecutados en la mano de la víctima y no en sus partes íntimas".
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló
Lo halló la Policía de Investigaciones tras allanamientos que realizó en la noche de este jueves en Puerto General San Martín, donde había sido secuestrado un 308 gris que se presume que tendría relación con la desaparición de la joven de 20 años que había sido vista por última vez el 30 de octubre.
Se trata de Kevin Leonardo Ayala, quien además está investigado como posible partícipe en el homicidio del policía Andrés Farías, que tuvo lugar el pasado 27 septiembre en Fisherton. Al momento de ser acusado en Rosario tenía la llave de unas esposas en su ropa interior