La Policía bonaerense detuvo en Olavarría a los padres biológicos de la pequeña y al supuesto comprador, que cuenta con antecedentes penales. Todos fueron detenidos.
La Policía Bonaerense detuvo en Olavarría a una pareja que había vendido a su bebé recién nacida a un peluquero que se dedicaba al tráfico de menores, quien también fue aprehendido.
Tras una investigación realizada por efectivos de la DDI de Azul y de la SubDDI local, la policía logró detener a los implicados y rescatar a la bebé recién nacida.
Los padres de la menor, un hombre de 36 años y una mujer de 29, fueron aprehendidos en la calle Amparo Castro al 5400, donde se secuestraron celulares y documentación de la beba.
En tanto, el peluquero (44) fue arrestado en Necochea al 2100. Allí la policía procedió a incautar una cámara de fotos con imágenes de la menor, un cordón umbilical y un mechón de cabello. La niña fue trasladada al Hogar Municipal Nemaste.
Según informaron desde el Ministerio de Seguridad bonaerense, el peluquero contaba con antecedentes penales por el delito de corrupción de menores que investiga la Unidad Funcional de Investigaciones Especiales de Azul.
La causa fue caratulada como "s/supresión de identidad de menor y falsificación ideológica de documento público destinado a acreditar la identidad de las personas", en la que interviene la la UFI 4 del Departamento Judicial de Azul, a cargo de María Serrano.
Cinco mujeres fueron demoradas al ser descubiertas con cocaína y marihuana ocultas en su calzado. Utilizaban un método sofisticado para burlar los controles. Algunas tienen vínculos con presos relacionados al narcotráfico.
El choque ocurrió pasadas las 22 cuando la víctima de 33 años caminaba por la zona de Avellaneda y colectora de Circunvalación y fue embestida por un Renault 9. El conductor se retiró del lugar y se presentó a la medianoche en dependencia policial.
El ataque ocurrió el sábado en un asentamiento ubicado en Crespo y Granadero a caballo. La víctima fue trasladada al hospital de niños Zona Norte de Rosario
El robo tuvo lugar el pasado sábado en las afueras de Rosario. Los delincuentes se llevaron celulares, dinero, una computadora, una consola de videojuegos y el DVR de las cámaras de seguridad.
Tras el crimen, la policía allanó un bunker al que habrían ido las víctimas y arrestó a cuatro sospechosos. La pareja de uno de los fallecidos declaró que los agresores le dijeron que fue una venganza