El conductor del Ford Ka que intentó coimear a policías en un control vehicular y después prendió fuego su rodado para que no se lo lleven al depósito municipal quedó en libertad por falta de antecedentes. Deberá comparecer cada dos días en la Oficina de Gestión Judicial.
El hombre de 42 años que fue detenido el pasado sábado en Pueblo Esther tras incendiar su auto al negarse a que sea remitido al corralón municipal, fue imputado este lunes. Quedó en libertad, ya que el juez contempló que no tenía antecedentes penales. De todos modos, deberá comparecer cada dos días en la Oficina de Gestión Judicial para acreditar su presencia y colaboración en el proceso de investigación.
Según informaron desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA), Mario Alberto L. fue imputado por los delitos de cohecho activo en concurso real con incendio en concurso real con lesiones leves en calidad de autor.
El juez de primera instancia Carlos Leiva hizo lugar a la imputación hecha por el fiscal de Flagrancia Hugo Enriquez. No obstante, rechazó el pedido de prisión preventiva y otorgó al hombre la libertad con la condición de comparecer cada dos días en la Oficina de Gestión Judicial para acreditar su presencia y colaboración en el proceso de investigación.
El pasado sábado quiso evitar un control vehicular porque tenía el seguro, la licencia de conducir y la tarjeta verde vencida. Quiso coimear a policías de Acción Táctica y, ante la negativa de los agentes, arrojó combustible en su Ford Ka y lo prendió fuego.
El incendio originó explosiones, una de ellas alcanzó al conductor de la grúa, quien tuvo que ser trasladado al Samco para las curaciones ya que sufrió quemaduras de primer grado en el brazo derecho, en el cuello y en la oreja derecha.
Un hombre que tenía vencida la cédula verde y su auto debía remitirse al corralón. Deslizó querer "arreglar" la situación y, ante la negativa de las autoridades, arrojó combustible en su vehículo e inició un incendio. Sufrió quemaduras, al igual que la persona que manejaba la grúa.