El presidente Fernández y el gobernador Perotti en linea, habían decidido el lunes la apertura de shoppings, bares, casinos y comunidades religiosas mediante el Decreto 487/20.
En ese tenor, el martes a la noche muchas iglesias, sobre todo evangélicas, abrieron sus puertas y celebraron reuniones religiosas de hasta 350 personas en Rosario. El martes a altas horas de la noche, el Gobierno hizo correr la voz de que el decreto no era tal, de que se trataba de una mala interpretación del texto original, y que en realidad se trataba de la autorización de reuniones religiosas de hasta 10 personas. Este último permiso ya está vigente desde hace un mes.
Iglesia Redentor decidió abrir las puertas de su templo convirtiéndolo en un bar a modo de reclamo, ya que éstos sí fueron habilitados a abrir respetando el “distanciamiento social” en medio de la cuarentena. Los pastores se vistieron de mozos, y en las bandejas cargaban una biblia porque "no solo de pan vivirá el hombre" dijeron.
“¿Ahora si podemos abrir gobernador Perotti?” se manifestaron los pastores de la iglesia vestidos de mozos en las redes sociales haciendo alusión a la decisión de la gobernación de la provincia de Santa Fe de dar marcha atrás a el decreto número 487/20 en la parte en que permitía la habilitación de nuevas actividades como las celebraciones religiosas.
En el reclamo reflejaron que aplicando los protocolos correspondientes, las comunidades religiosas pueden cumplir su derecho de ejercer libremente su fe.
“Queremos ejercer nuestro derecho constitucional de practicar nuestra Fe. Nos preocupa que cercenen nuestros derechos”, aseguró el pastor Daniel Cattaneo frente a los fieles.
Será desde el jueves 18 a través del Observatorio Ambiental de la UNR y colaboración de otras áreas de la propia casa de estudios y del Conicet. El objetivo es "construir datos e información para proteger las islas y evitar su depredación”, explicó el rector Franco Bartolacci.