En San Lorenzo, el tránsito era complicado por la gran cantidad de vehículos varados a la vera de la autopista. Estiman que entre 12 mil y 15 mil llegan por día al puerto. Los choferes se quejaron por la falta soluciones.
La postal del colapso de camiones por la cosecha gruesa volvió a repetirse este año en cercanías de los puertos cerealeros de la región. Las largas filas a la espera de la descarga se formaban cerca de San Lorenzo, donde estiman que entre 12 mil y 15 mil camiones llegan por día para llevar los granos al puerto. Los camioneros contaron que el panorama es similar a la misma época del año pasado: varias horas de espera sobre la ruta, con pocos servicios y mucha paciencia.
Un móvil del programa De 12 a 14 (El Tres) recorrió el acceso norte de San Lorenzo. Según contó la periodista Fernanda Rubio, desde el kilómetro 19 de la autopista Rosario-Santa Fe, el colapso era total.
“Hace cuatro horas que estoy esperando. Esto pasa todos los años y todo el mundo quiere descargar para volver rápido a casa”, dijo uno de los camioneros. Otro de los choferes, oriundo de Venado Tuerto, se quejó por la falta de obras y operativos de circulación vehicular. “Nadie hace nada para cambiar esto”, expresó.
Las autoridades de la Municipalidad de San Lorenzo habilitaron el tránsito pesado por los accesos sur y norte, quedando reservado el acceso centro para autos y vehículos livianos. Estiman que la llegada masiva de camiones continuará por los próximos 15 días.
Mientras tanto, agentes de tránsito del gobierno provincial y de fuerzas federales coordinan un operativo especial en la zona desde el 1 de abril.
El mandatario rosarino contrajo matrimonio este mediodía. Sus hijos fueron los encargados de entregar los anillos y compartieron la ceremonia familiares, amigos y funcionarios.
Con 46 casos confirmados y probables en lo que va de 2025, Santa Fe es la segunda provincia más afectada después de Buenos Aires. El sur provincial suma riesgo tras las inundaciones por la tormenta de Santa Rosa
El inicio, poco antes del mediodía de este jueves, fue en una playa de estacionamiento de camiones cerca del centro urbano de la ciudad ubicada a unos 52 kilómetros de Rosario. El combustible encendido comenzó a derramarse por la zona.
Alejandra, la titular de Sophies Pattiserie, denunció el miércoles que ocho jóvenes consumieron en el bar, pero la estafaron. Este jueves, una de las implicadas fue al local y pagó la cuenta.
La masiva caravana partió desde la planta “General Savio” (ex-Somisa) y copó el centro de la ciudad en rechazo al apagado del alto horno, los despidos y la precarización laboral que enfrentan más de 1.200 obreros tercerizados del Grupo Techint.