Se trata de un joven oriundo de Rosario que regresó de Estados Unidos días atrás y que el sábado pasado realizó en su casa de fin de semana en Pueblo Esther una fiesta privada a la que asistieron más cien personas. Ahora cuenta con arresto domiciliario.
Todo comenzó cuando en la madrugada del día domingo, el llamado de un vecino alerta a la CAU de que en una vivienda de barrio Cozzoni se estaba realizado una fiesta privada. Allí se presentan las autoridades de control municipal y la policía para clausurar la fiesta y desalojar a los presentes. Un evento que fue organizado por un joven hijo del dueño de la propiedad, un empresario del rubro frigorífico. Y luego surgió el dato de que ese mismo estaba violando su aislamiento obligatorio por haber regresado de Norteamérica días antes.
El intendente Martín Gherardi explicó sobre la clausura, “este tipo de fiesta están prohibidas dentro de la localidad; además violaba el decreto que hicimos hace días por la emergencia sanitaria prohibiendo todo evento público y privado. Así se desalojaron a las más de cien personas que eran todas de Rosario y localidades de la región. Y luego nos enteramos que esta misma persona que había organizado la misma, había regresado el 7 de marzo de Estados Unidos y no estaba cumpliendo con la cuarentena obligatoria.”
Así es que el Ejecutivo local procedió a denunciar al sujeto identificado como Marcos Moretti en la dependencia policial local dando intervención a la Justicia. Y posteriormente el fiscal Gustavo Ponce Asahad, a cargo de la unidad fiscal especial por delitos relacionados al coronavirus, ordenó su arresto domiciliario en la vivienda ubicada en las torres Maui de Puerto Norte de Rosario a la espera de la correspondiente imputación. “Es un ejemplo de irresponsabilidad. Decidió aprovechar este parate para hacer una fiesta sin tomar conciencia de lo que estamos viviendo y poniendo en riesgo la vida de muchas personas.”
El funcionario también resalto de que en esa fiesta no participaron vecinos de P. Esther; “es su casa de fin de semana en su terreno particular pero vive en Rosario” – aclaró argumentando que obviamente desconocían esta actividad; en una localidad que generalmente se destaca por diferentes controles en la que actúan distintas fuerzas públicas mancomunadamente. Y por último se supo que también la mencionada fiscalía investiga la realización de la fiesta y en todo caso, de ser factible, el aislamiento también de todos los que asistieron a la misma.
Se montó en Fisherton, en el domicilio de Fernando Riccomi, que regresó el fin de semana de Chile y lo denuncian por no recluirse en su casa. Es el 18º arrestado en Rosario. En el país vecino estuvo con un equipo de rugby que ya se encuentra aislado