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La decisión la tomaron los delegados de la Unión Tranviario Automotor en asamblea. “A partir de las 0 de mañana volvemos a prestar el servicio con normalidad”, destacó el gremio.
Los delegados de la Unión Tranviario Automotor (UTA), definieron este martes en asamblea levantar el paro de choferes de colectivos que comenzó el pasado sábado. La decisión se tomó porque finalmente se destrabó el trámite y Nación envió los subsidios que ya se depositaron en las cuentas de los trabajadores.
"Como en el transcurso del día de hoy (martes) la Nación giró los fondos y la provincia lo pudo redistribuir a cada una de las empresas y estas han depositado en cada cuenta de los compañeros y compañeras la totalidad del salario adeudado, a partir de las 0 horas del día de mañana (miércoles) volvemos a prestar el servicio con normalidad", expresó en La primera de la tarde (Radio 2), Sergio Copello, secretario general de la UTA Rosario.
Con respecto a la decisión de que el servicio se restablezca desde primera hora del miércoles y no de forma inmediata, el gremialista explicó que tiene que ver con una cuestión de logística. "Hay que diagramar quienes tienen que tomar los servicios, ver si están en condiciones. También hay que limpiar las unidades y cargarles combustible", sostuvo.
Además, Copello remarcó que los choferes hacen unos 14 meses que vienen cobrando de forma desdoblada su salario. "Eso demuestra la buena voluntad de los trabajadores de prestar el servicio", remarcó.
En cuánto a lo que se necesita para que no se vuelva a repetir el corte de crédito laboral en los próximos meses, el referente de los conductores de colectivos indicó que "tienen que colocar el caballo adelante del carro y disponer que los sueldos de los trabajadores estén los primeros días del mes y con eso se garantiza que la ciudadanía, los servicios esenciales, la seguridad, la sanidad, tengan el servicio para poder ir a trabajar".
En los próximos meses Litoralgas conectará la localidad al sistema nacional de gas natural. El día de la conexión inspeccionará las instalaciones internas de todos los domicilios. Los clientes de la empresa deben realizar la revisión previa con un gasista matriculado.
La medida, que afectará a unos 600 trabajadores, responde a la caída en la demanda regional y al ingreso de autos chinos en el mercado brasileño. En junio la planta ya frena por mantenimiento y vacaciones.
