El periodista de A24, Rolando Graña, en su programa GPS, se hizo eco de lo sucedido y cruzó fuerte a la jueza Verón. "¿Para que lo internó la jueza?; ¡Para que se calle la boca!; porque la denunció a ella", aseveró.
El caso de la internación psiquiátrica contra Miguel "Pato" Villanueva alcanzó repercusión nacional. Según había comentado el denunciante, una orden judicial de la magistrada Eleonora Verón indicó que se lo interne en un psiquiátrico, “desconociendo los informes médicos”.
Ante la difusión de lo ocurrido, el caso tomó alcance nacional. El periodista de A24, Rolando Graña, en su programa GPS, comentó que "a uno de los periodistas que más denunció al narcotráfico, a la policía corrupta, con un estrambótico proceso judicial, lo metieron preso acusándolo de estar insano mentalmente".
"Pato Villanueva es un periodista extremo. Denunció a narcos, policías. Buena parte de las denuncias que él hizo, se comprobaron. Está enfermo de cáncer, en tratamiento de quimioterapia, y el viernes pasado lo metieron en un loquero", relató el conductor visiblemente enojado.
Además, en el transcurso del programa se hizo hincapié en la evaluación que se le hizo al denunciante. Tal estudio consignó que el mismo está ubicado "en tiempo y espacio", por lo que no debería haber sido internado.
"Luego de la evaluación se concluye que el señor Miguel Ángel Villanueva NO presenta riesgo cierto e inminente para sí y/o para terceros, por lo que NO cuenta con criterio de internación por salud mental al momento actual, no obstante permanecerá en el Hospital por estricto cumplimiento de la orden penal, hasta sea evaluado por juntas especiales", decía parte del informe médico al que pudo acceder Sin Mordaza.
En efecto, se trata de una maniobra judicial a cargo de la jueza Eleonora Verón, el fiscal Carlos Covani y la Defensora Pública Florencia Chaumet, quienes buscan acallar la voz del periodista. "¿Para que lo internó la jueza?; ¡Para que se calle la boca!; porque la denunció a ella", aseveró Rolando Graña.
Finalmente, manifestó: "Esperemos que esta pesadilla termine pronto, nosotros la vamos a seguir, para ver que respuesta hay".
Sin Mordaza tuvo acceso al informe de evaluación realizado por profesionales de la salud de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros. De esta manera, se confirma que todo se trató de una maniobra judicial para acallar la voz del periodista.