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Fue cuando uruguayos e italianos empataban 0-0, pero el árbitro no le mostró tarjeta por eso al fantástico atacante charrúa.
La imagen de la mordida del delantero uruguayo Luis Suárez al defensor italiano Giorgio Chiellini dio la vuelta al mundo y generó un sin fin de opiniones y versiones a lo largo y ancho del universo. Incluso hasta se rumorea de la posibilidad de una sanción para el atacante charrúa. Pero qué fue lo qué pasó en esa situación? El partido estaba 0-0 y la impotencia se adueñaba de algunos jugadores de Uruguay. Como el caso del fantástico delantero Luis Suárez, que luego de un ataque charrúa mantuvo un entredicho con el defensor italiano Giorgio Chiellini en plena área.
En uno de los ataques uruguayos, Suárez quedó en el área muy cerca del defensor, el delantero pareció tirarle un cabezazo, aunque las imágenes posteriores mostraron que en realidad lo había mordido, mientras que el defensor le terminó tirando un codazo que no llegó a destino.
Por suerte para Uruguay, ni el árbitro ni el juez de línea se percataron de la acción y le terminaron perdonando la vida al atacante charrúa, pieza clave en el andamiaje del equipo de Tábarez, puesto que no le sacaron tarjeta pese al reclamo airado del futbolista italiano, que le mostraba la marca de la mordida en su hombro.
Tres minutos más tarde llegó el gol salvador del defensor Diego Godín, que le terminó dando la clasificación a octavos de final de la Copa del Mundo.
Lo extraño de esta situación es que es la tercera vez que el delantero Luis Suárez muerde a un rival, puesto que ya le pasó en Ajax de Holanda (contra un jugador del PSV Eindhoven) y en Liverpool inglés con un defensor del Chelsea.
Godín, a los 35 minutos del segundo tiempo, puso a la Celeste arriba en el marcador. La Azzurra, volvió a irse del Mundial en primera ronda como en Sudáfrica.
