“Lo agarraron entre dos policías, lo empujaron contra el piso y le dieron la cabeza contra el cordón de la calle”, fue lo que aseguró Jésica Rodríguez organizadora y testigo del procedimiento policial que tuvo lugar durante la manifestación “Todos por Martina”.
La mamá de la chiquita de 8 meses que está internada con riesgo de vida en Rosario, contó que los incidentes que tuvieron lugar en la esquina de Belgrano y 9 de Julio desencadenaron en la detención de un joven de 27 años que solidariamente se había sumado a la marcha con carácter de solidario pero que lamentablemente pasó a su segundo plano a consecuencia de lo ocurrido.
Jésica comentó que los hechos tuvieron origen luego de que una mujer que intentaba pasar con su vehículo los tratara de forma despectiva porque estaban obstaculizando el paso del tránsito. Sobre esto indicó que la policía llegó “porque una mujer imprudente y maleducada, empezó a insultarnos diciéndonos qué hacen acá estos negros de mierda. Yo estoy pidiendo por mi hija que está en riesgo de vida y yo la dejé para pedir y reclamar que alguien me dé respuestas, vinieron estos policías porque esta mujer nos empezó a insultar a todos por qué, porque estoy reclamando algo justo”.
Lo cierto es que los testigos que pudieron observar el suceso señalaron a dos efectivos de la seccional 27 como responsables de una cuestionable agresión a este muchacho que continuaba hasta esta noche en calidad de demorado en la comisaría, en principio por “resistencia a la autoridad” y a disposición del fiscal en turno. De todos modos, luego de los trámites de rigor era probable que recuperara la libertad con el transcurso de las horas.
Al respecto, el comisario Timoteo Aranda dio su versión sobre los hechos y contó los pormenores que derivaron en la aprensión de este hombre. “Se presentó en la comisaría un señor muy molesto y ofuscado, diciendo de que en la esquina de la comisaría había un grupo de personas que estaban obstruyendo el tránsito vehicular y que exigían a las personas un dinero para dejarlas pasar. Por tal motivo, personal de esta dependencia policial se dirigió al lugar y observa a un muchacho con una camiseta de Boca, el cual estaba golpeando a un vehículo. Se trata de calmar a esta persona, la cual agrede al personal policial que actuó en ese momento, se origina un forcejeo, se lo reduce y se lo traslada a la dependencia policial”.
Quienes estuvieron presentes en el lugar durante tal episodio dieron a entender que estos agentes actuaron de forma sumamente agresiva y violenta; y sobre esto Aranda, basándose en el acta de procedimiento, manifestó: “Yo respaldo a mi personal porque sé con la profesionalidad con la que trabajan todos mis empleados. De ahí en más, si hubo un exceso o no, yo no se lo puedo asegurar porque no estuve en el lugar. Por eso están las cámaras de seguridad y el fiscal que entiende en la causa va a determinar si hubo o no exceso en el accionar de mis empleados”.
Fue la respuesta que le dio a la prensa tras ser consultado sobre la forma en la que salió de la comisaría a atender a los manifestantes que pedían la liberación del muchacho de 27 años apresado por la policía durante la manifestación “Todos por Martina”.
La concentración tuvo lugar en la esquina de la municipalidad. Allí se convocaron familiares, amigos y allegados a Jésica Rodríguez para acompañarla y con la intención de que no sólo las autoridades sino todos los vecinos de la ciudad se hagan eco de su reclamo.