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El siniestro afectó la cocina de la institución educativa y su directora, Zunilda González, confirmó que el origen del evento fue a partir de un cortocircuito. Los bomberos voluntarios acudieron al lugar tras un llamado del Comando Radioeléctrico, sofocó el fuego y realizó un enfriamiento.
Quemada por completo. Así quedó la ventana afectada por el fuego que se originó por un cortocircuito en un radiograbador que, aparentemente, había quedado enchufado
Cerca de las 2.50 de este miércoles, el cuartel de Bomberos Voluntarios recibió una comunicación desde la central del Comando Radioeléctrico en la que solicitaban la presencia de una dotación por un incendio en el edificio escolar de la Escuela N° 247 “Martín Miguel de Güemes”.
Al llegar el personal, se encontró con que el siniestro estaba focalizado dentro de la cocina del establecimiento educativo y fue entonces que se dispusieron a trabajar. En el lugar había varios elementos combustibles y el fuego tomó una cortina, un equipo de música y el vidrio de la ventana que en realidad era de policarbonato. Después de apagar el fuego, se encargaron de sacar el humo haciendo una ventilación y aproximadamente a las 3.40 regresaron al cuartel.
Respecto a los hechos, la directora de la institución, Zunilda González, agradeció principalmente la colaboración de los bomberos ya que, si bien los daños fueron importantes, las consecuencias podrían haber sido mucho peores. Además de lo antes mencionado, se pudo establecer que el fuego afectó los utensilios de la cocina, los termos y otras tantas cosas se vieron afectadas por el hollín. La señora directora dijo que después de limpiar todo este sector – que por ahora quedó inutilizable -, seguidamente el trabajo será hacer un reacondicionamiento de esta parte del edificio.
Por lo pronto, después de comunicarse con sus superiores, Zunilda ratificó que el Ministerio de Educación se hará cargo de la mayor parte de los gastos que demande la refacción del lugar. De todos modos, esto llevará algún tiempo y aprovechó para transmitirles a los padres de los alumnos que concurren a este establecimiento educativo que las clases continúan normalmente, al igual que el comedor porque los chicos van a seguir recibiendo sus raciones sólidas de alimento como todos los días.
Si bien fue un trago amargo para toda la comunidad educativa de la Escuela N° 247, ahora todas las fuerzas están puestas para poder salir adelante.
