El intendente municipal Nizar Esper fue el único orador del acto protocolar en el marco de la celebración del Bicentenario de la Independencia. Fecha en que además se conmemoran 128 años de la fundación de nuestra ciudad.
Durante el acto oficial que tuvo lugar en la Plaza 9 de Julio, como ya es costumbre se procedió al izamiento de las banderas y se entonaron las estofas del himno nacional argentino, que en esta ocasión con la participación de la mezzosoprano Ivana Grennon junto al Coro de Lenguaje de Señas “Abriendo Caminos”.
Además durante dicho acto se procedió a destapar una placa que, de ahora en más, permanecerá al lado del monolito que está en el centro de la plaza. Por otro lado, la artista Lorena Orellano hizo entrega de dos de sus obras como obsequio a la municipalidad de nuestra ciudad. Y además se plantó un ejemplar de Ceibo junto a autoridades y alumnos de la Escuela Técnica N° 450 “Ejercito Argentino”.
Tras esto el intendente Nizar Esper hizo uso de la palabra y recordó los pormenores de la fecha patria y en parte de su discurso recordó a su país de origen, Siria. Durante su exposición contó en qué circunstancias arribó, de la mano de sus padres, a Argentina. “Arroyo Seco mi ciudad, nuestra ciudad, se transformó en mi lugar en el mundo. Tanto es así que tengo la satisfacción de que la gente me haya honrado con la responsabilidad de conducirla. A siete meses de mi asunción y en este día tan emblemático, renuevo mi compromiso gestionando, proyectando y trabajando duro para que día, a pesar de que muchas veces las circunstancias son muy adversas”, esgrimió.
Y de esta manera prosiguió: “En esta celebración del Bicentenario de la Independencia, quiero pedirles que emulemos a aquellos hombres que decidieron cortar lazos con España y que a pesar de sus diferencias se unieron por una causa colectiva donde la meta final aún está vigente, la creación de una sociedad mejor y más justa. Aún estamos a tiempo de revisar nuestras actitudes cotidianas y ser verdaderamente libres. Nuestra sociedad necesita superar los vientos de divergencia que soplan sobre ella. Reivindiquemos nuestra historia y aprendamos de ella porque los pueblos que se olvidan de su pasado, están condenados a repetirlo”, así cerró su discurso tras el grito de Viva la Patria!.