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Lo manifestó Juan Carlos Mussolini, vecino de Jonas Salk al 600. Salió a una fiesta de cumpleaños junto a su esposa y cuando regresó se encontró con que ladrones habían entrado a robarle a su casa.
El segundo televisor. Hace un año y medio atrás también le habían robado el televisor de adentro de la vivienda. Foto: Gentileza NicolásTrabaina
El domingo aproximadamente a las 2.30 de la madrugada, Juan Carlos Mussolini y su señora regresaron de una fiesta de cumpleaños a la cual estaban de invitados. Al llegar, ya dispuestos a descansar, se encontraron con la triste sorpresa de que su vivienda ubicada sobre calle Jonas Salk al 600 tenía una puerta violentada y adentro un gran desorden.
La angustia los invadió por completo y allí pudieron advertir el faltante de un televisor que habían comprado hace sólo tres días. Más allá de los daños, el revuelo dentro de la casa y el robo propiamente dicho; el vecino se mostró conmovido con las circunstancias y recordó que hace un año y medio atrás fue víctima de un episodio muy similar. En aquel entonces también le habían sustraído el televisor. Además dijo que el “daño mental” que le generó este nuevo suceso es muy lamentable no sólo por él sino por su mujer que también se sentía mal.
Mussolini contó que esta mañana consiguió dialogar con la Secretaria de Gobierno Municipal Susana Nieri. Dijo que lo recibió muy bien pero aprovechó para reclamarle por mayor presencia policial y para pedirle que se trabaje más fuertemente en el tema seguridad. El pedido fue en general, no sólo para su barrio sino para “todos los barrios de la ciudad”, remarcó.
