La falta de cuidado hacia nuestros escasos recursos es una preocupación constante. Sorprendentemente, los empleados encargados de la recolección de residuos ya no se asombran ante lo que encuentran en los contenedores destinados para desechos domésticos. Desde colchones y sillones hasta ventanas y espejos, así como otros objetos insólitos, han aparecido en repetidas ocasiones en el interior de estos receptáculos destinados originalmente para "las bolsitas", es decir, los desechos domésticos de los vecinos.
Hoy, como ejemplo palpable de esta problemática, podemos mencionar el contenedor ubicado en la calle 3 de Febrero, entre General López y Sarmiento. Este contenedor se encontraba tan repleto de escombros que resultaba imposible levantarlo por parte de los trabajadores encargados de su vaciado. Esta situación refleja la falta de consideración y responsabilidad de algunas personas hacia los escasos recursos de los que disponemos, así como hacia el personal que se esfuerza por mantener nuestras calles limpias y ordenadas.