El seleccionado argentino de fútbol perdió ante su par de Alemania por 1 a 0 en la final de la Copa del Mundo. El tanto del nuevo campeón del mundo lo marcó Goetze a los 7' del segundo tiempo del suplementario.
La Selección perdió la final en el suplementario por un golazo de Göetze y Alemania nos volvió a ganar como en el 90. La Argentina jugó bien, hizo un partido muy digno y el árbitro italiano no cobró un clarísimo penal a Higuaín en el ST. Pese al dolor, hay que aplaudir a estos muchachos.
Duele. ¡Cómo no va a doler! Argentina estuvo a tres mano a mano de dar otra vuelta olímpica. El cuco Alemania no fue tan cuco y recién pudo soñar con el título en el segundo suplementario. Debió ser el gol de Higuaín, el de Messi, o el de Palacio. Contra grandes como los alemanes, son ventajas que valen un campeonato del mundo.
¿De qué partido hay que hablar? ¿De ése que Argentina tuvo tres chances de gol de ésas que nunca soñás posible en una final o del de una Alemania físicamente arrolladora que controló la pelota pero que no logró quebrar futbolísticamente a la Selección?
Argentina les cedió la pelota a los alemanes pero con las líneas bien juntas y atentas para cortar y salir rápido de contra. Alemania la tenía, amagaba ganar con superioridad numérica pero duró poco la sensación de imbatibilidad germana porque por el sector izquierdo de su equipo, la Selección empezó a herir. Y mucho.
Con un Biglia impecable, un Zabaleta en un gran partido, los centrales seguían firmes. El tema es que los fantásticos tendrían sus chances. A Higuaín le cayó la pelota que soñó toda su vida y le pifió al arco en el arranque. Boateng no podía solo y veía que podían sufrir. Mientras tanto, Lham pasaba y pasaba al ataque, Müller era amenezante y Schweinsteiger se imponía en el medio. El partido era cerrado hasta que un cabezazo de Hoewedes en el palo puso los merecimientos en igualdades de condiciones, al final del primer tiempo.
Messi deambulaba entre dos toques buenos y uno malo hasta que le llegó en el segundo tiempo "la" chance. Pierna izquierda, dentro del área, marca atrás y sacó un zurdazo normalito en un tiro que debió valer la Copa del Mundo. La presión alemana empezó a aumentar y Schuerrle, con sus limitaciones a veces técnicas, forzó errores y ganó llegadas, como la del gol. Un centro atrás de Lahm para la entrada de Kroos parecía letal pero ellos también se equivocan...
Alemania no ganó por el árbitro pero le dio un guiño cuando un amarilla/roja a Neuer por salir con la mano fuera del área y golpear a Higuaín, se convirtió en tiro libre alemán. Era penal... Y no era una jugada menor.
El suplementario repetiría el final del partido. Alemania dominadora, con control de pelota y Argentina buscando de contra "su" oportunidad. Y la tuvo con Palacio cuando quiso le quedó picando en el área y decidió jugársela de emboquillada.
El golazo de Göetze desnudó errores varios en la defensa pero sería injusto caerles todo a ellos. La Selección lo había perdido en el otro arco.