Por Hernán Claus
"Nosotros siempre hablamos adentro de la cancha, nunca afuera", arenga Dibu Martínez, en el túnel, en la previa del partido ante Países Bajos, un cuartos con olor a final. Justamente dentro del campo de juego es donde la Scaloneta se ha ganado el respeto internacional. En la previa de la semifinal ante Croacia, se nota esa consideración por el talento y la garra argentina, algo que Van Gaal y los suyos no hicieron... Y la definición de Zlatko Dalić, el DT croata, casi que es exacta con lo que genera la Selección en la gente, esa gente que está ilusionada por la calles de Doha, de Rosario, de Buenos Aires, de Bangladesh y del mundo.
"Messi está de nuevo en un nivel impresionante. Porque no sólo hace goles, mete asistencias, está muy conectado con todo el juego del equipo argentino. Ellos tienen una Selección que deja la piel, compacta y extraordinaria. Tienen sus propias armas y quieren darlo todo", relata Dalić, como si hubiese estado en los festejos de los cuartos, bajo el diluvio porteño. Y ese dejan la piel, se emparenta con la frase de cabecera que Messi y Scaloni le dijeron a Olé en la previa de este Mundial. "Este equipo nunca los va a dejar tirados".
Ahí están las emociones a flor de piel. Ahí están los recuerdos de las semifinales jugadas -y ganadas-, pero también el espejo retrovisor mostrando el baile croata en Rusia 2018, en el que sobreviven pocos titulares por lado, pero importantes: Messi y Modric, los top, pero también Otamendi, Di María y Tagliafico por Argentina, y Lovren, Brozovic y Peresic por Croacia. Cada uno elige su forma de vivir la previa de otro partido histórico, porque no todos los días se está entre los cuatro mejores de un Mundial. De hecho, la Selección llegó a esa instancia en seis de 18 torneos disputados por lo que ya es bueno valorar todo lo que está sucediendo: salió campeón del mundo dos veces (1978 y 1986) y perdió tres finales (1930, 1990 y 2014).
Bravo en todo sentido
La Selección modelo 2022 está en las puertas de un nuevo partido definitivo, aunque el rival será durísimo. Porque tiene grandísimos jugadores (el crack Modric y varios más) y. por eso, Scaloni resalta que "esperamos un partido muy difícil contra uno de los denominados realmente equipo. Juegan como lo que son: un gran grupo y un gran equipo. Las comparaciones con el otro Mundial no corresponden. Todos los partidos son diferentes. Dan la sensación de grupo que es lo que realmente interesa".
Después de las peleas, del "andá pa allá, bobo" que ya es remera, ringtone y tatuaje, de los dos lados del mostrador intentan bajarle el tono picante a la primera semifinal que se jugará en Doha, justamente un martes 13, una fecha ya controversial desde lo cabulero...
El Lionel DT, que observó que varios medios europeos le intentan poner el mote de Bad-boys (chicos malos) a su selección, recuerda las credenciales y muestra los valores de su equipo. "Nosotros sabemos perder y sabemos ganar. Perdimos con Arabia y nos fuimos calladitos. Ganamos la Copa América en Brasil y se vio la imagen más linda con Messi y Paredes sentados con Neymar. Yo no compro esa que no sabemos ganar, tenemos que cerrar el tema de una vez porque respetamos a todos nuestros rivales”. Mientras que Dalic buscó no darle de comer a la interna de la Scaloneta, trató de no pisar el palito de Van Gaal que hizo enfurecer a Leo. "Fue un partido complicado. Caliente. Algunos momentos se dieron conductas que no tenían mucho que ver con el fútbol. Espero que no suceda en este caso".
Messi genera respeto y admiración. Y eso se palpa en cada declaración y en los cuidados que tomará Croacia para intentar frenarlo, para que no siga jugando el mejor Mundial de su carrera. Leo, con cuatro goles, sabe de la relevancia de la semifinal, pero disfruta la previa. Quiere que el grupo no llegue cargado de tensiones para que pueda desplegar el juego que tuvo en algunos pasajes de este Mundial, aunque sólo ante Polonia redondeó una actuación sin sobresaltos. La vida de Leo y la Selección no saben de triunfos holgados en momentos definitorios: siempre se dio el sufrimiento para que luego se dé rienda suelta a la alegría.
Este martes por la tarde (esta noche aquí en Doha) se parará nuevamente el país. Las calles volverán a estar desiertas, solo habrá colectiveros y taxistas escuchando la radio y no habrá grietas por un rato: los 45.000.000 de argentinos tienen un sueño, el mismo que el de Messi. Pero no estamos solos, hay una gran parte del planeta que también hará fuerza y tendrá sus cábalas porque desean que Leo esté el 18 de diciembre en Lusail, jugando su segunda final del mundo.
FORMACIONES
Argentina: Dibu Martínez; Molina, Romero, Otamendi, Tagliafico; De Paul, Enzo Fernández, Mac Allister, Di María o Paredes o Lautaro Martínez; Messi y Julián Alvarez. DT: L. Scaloni.
Croacia: Livakovic; Juranovic, Lovren, Gvardiol, Borna Sosa; Modric, Brozovic, Kovacic; Pasalic, Kramaric, Pasalic y Perisic.
Estadio: Lusail (Doha, Qatar).
Hora: 16, de la Argentina.
Arbitro: Daniele Orsato (Italia).
TV: TyC Sports, TV Pública y DirecTV Sports.