El operativo estuvo a cargo del fiscal general Carlos Gonella (titular de la Procelac) y el fiscal federal de Roque Sáenz Peña, Carlos Sansserri. Esta causa es un desprendimiento de una mayor, en la que se había logrado desbaratar a una organización narcocriminal que transportaba clorhidrato de cocaína a Europa.
Foto: Lucas Herrera/Ministerio Público Fiscal/www.fiscales.gob.ar Fotos: Lucas Herrera/Ministerio Público Fiscal/www.fiscales.gob.ar
En el día de ayer se realizaron operativos en todo el país que consistió en el allanamiento simultáneo de 39 inmuebles vinculados a una organización criminal que se dedicaba al tráfico de clorhidrato de cocaína a Europa en grandes cantidades, en el marco de una nueva causa que se les sigue por el presunto lavado de activos de origen ilícito. La actividad fue supervisada desde el Centro de Análisis, Comando y Control de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), en Ezeiza, por el titular de la Procuraduría de Criminalidad Económica (Procelac) Carlos Gonella. Junto a él, estuvo el coordinador del área de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo, la coordinadora del área de Delitos Tributarios y Contrabando de la Procelac, y otros secretarios y agentes de distintas áreas de la Procuraduría.
En la causa principal por contrabando agravado de más de mil kilos de clorhidrato de cocaína, se encuentra detenido bajo el régimen de prisión domiciliaria el líder de la organización, quien en breve deberá enfrentar el juicio oral. A raíz de ese expediente, se formuló uno nuevo en el que se comenzó a investigar el presunto lavado de activos de la banda. Esta investigación está a cargo del fiscal federal de Roque Sáenz Peña, provincia del Chaco, Carlos Sansserri, y la Procelac. En ese contexto, a principios de este mes, solicitaron ante el juzgado federal a cargo de Zunilda Niremperger, donde está radicada la causa, una serie de medidas, entre las que se encontraba el pedido de allanamientos que se ejecutó hoy. La magistrada había investigado y elevado a juicio otro caso contra la misma organización narcocriminal, por el contrabando de una tonelada de cocaína.
Los números dan una impresión mayor de la magnitud que tuvo el operativo: 23 domicilios en la Ciudad de Buenos Aires, 4 en Mar del Plata, 3 en otras localidades de la provincia de Buenos Aires, 6 en Santa Fe y 2 en Santiago del Estero, divididos en particulares, domicilios de empresas, inmuebles rurales, estudios jurídicos, notariales y contables. Esto implicó el uso de 242 oficiales de la PSA, desplegados en más de 50 móviles, que fueron coordinados desde el Centro de Análisis por el Comisionado Mayor de la fuerza Mario Fernández. Además, participó todo el personal del área de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo y otros agentes de las restantes áreas de la Procelac, lo que llevó a que 23 personas del MPF estuvieran supervisando los distintos allanamientos en el lugar.
Como resultado de los operativos, se detuvieron siete personas, de las cuales dos son abogados. Además, se secuestró, entre otras cosas, diversa documentación en distintos formatos, computadoras, dinero en efectivo, joyas, relojes, obras de arte, armas de fuego en situación irregular y en el domicilio de uno de los contadores se hallaron cien mil dólares. Estos elementos serán incorporados a la causa para su posterior análisis.
En diálogo con Fiscales, Gonella dijo: “Estamos conformes con el resultado del operativo, quizá uno de los más complejos que hemos llevamos a cabo hasta ahora”. Además, señaló que “debe destacarse el trabajo conjunto entre el Ministerio Público Fiscal, el Poder Judicial y la Policía de Seguridad Aeroportuaria en el marco de una causa con todos los componentes del crimen organizado transnacional: narcotráfico, lavado de activos a través de estructuras jurídicas, gran cantidad de bienes, empresas, diversidad de prestaciones profesionales, entre otras cuestiones típicas de estas organizaciones”.
Los procedimientos estuvieron a cargo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria y se desarrollaron en la casa propiedad de Patricio Gorosito, en el domicilio de uno de sus socios más cercanos y en una reconocida escribanía de esta ciudad.