El gobernador salió al cruce de las críticas provenientes del PRO por presentar a Raúl Lamberto como defensor del Pueblo. Tras remarcar que la defensoría es “un órgano político”, consideró como mucho más grave que “en la Oficina Anticorrupción haya un militante político”.
A menos de 48 horas de vencimiento del plazo para la recepción de observaciones a la postulación del ex ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, al cargo de defensor del pueblo presentado en la Legislatura por el Ejecutivo, el gobernador Miguel Lifschitz salió en defensa del ex funcionario.
En la mañana de este lunes, el diputado provincial de Cambiemos, Rodrigo López Molina, presentó la impugnación al pliego que propone a Lamberto para el cargo, entre otras cosas señalando que “al ser la Defensoría del Pueblo un órgano que tiene como requisito fundamental ser independiente y autónomo al Gobierno no es compatible que el candidato propuesto fuera afiliado, militante y dirigente del partido político gobernante”.
Ante esto, el gobernador santafesino sostuvo que la Defensoría del Pueblo no es “un órgano de control del Ejecutivo”, sino “un órgano político que tiene que ocuparse de atender demandas y de las instituciones, y creo que el doctor Lamberto tiene una larga trayectoria que lo avala en esa función”.
Y respondiendo a la impugnación presentada por el legislador de Cambiemos, Lifschitz aseguró consideró “más grave es que en un organismo nacional como la Oficina Anticorrupción haya un militante político como la señora Laura Alonso o que se haya votado en la Legislatura Nacional a Echegaray para dirigir la Auditoría General de la Nación”.
El diputado provincial Roy López Molina encabezó un acto en el bar El Cairo, donde hizo pública la presentación que hará en la Legislatura impugnando al ex ministro de Seguridad.