A diferencia de los que sucede en otras terminales del país, en la planta no hay trabajadores suspendidos ni despidos. El año próximo se pretende llegar a una producción de 34 autos/hora.
Mientras el común denominador de las terminales automotrices de Argentina hay suspensiones por una baja en la producción y venta de unidades cero kilómetro, en la planta de General Motors en Rosario la situación es normal.
En contacto con IMPULSO, Antonio Milici, referente gremial de SMATA (Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor de la República Argentina) en Rosario, describió: “Nosotros tuvimos una baja en julio pasado, donde hubo algunas suspensiones pero con el cobro total de los salarios. Bajamos de 34 a 32 autos por hora y luego llegamos a 26. A la fecha nos mantenemos con el mismo nivel de producción y esperamos recuperar el máximo histórico durante el año entrante”.
En su planta de Rosario la automotriz General Motors produce las líneas delos vehículos Agile y Corsa II, con dos turnos de trabajo.
Vale recordar que en 2007 alcanzó el récord y sacó de las líneas de montaje un total de 115 mil unidades cero kilómetro.
La situación a nivel país
Para este año, las empresas esperan vender unas 650.000 unidades, lejos de los 950.000 autos que se vendieron en 2013. Pero sin llegar a las 210 mil que se colocaron en 2002. De todos los autos que se fabrican en Argentina, el 60% se exporta con Brasil, cuya demanda cayó un 24% este año y explica parte de la baja en la producción que experimentan algunas terminales.
La Asociación de Empleados de Comercio marchó por el centro rosarino, mientras que ATE realizó un acto en la esquina de Corrientes y Córdoba, junto a organizaciones sociales. Ambos gremios rechazaron las políticas que lleva adelante el Gobierno nacional y advirtieron por el impacto que la Ley Bases tendrá en los trabajadores.