Un tanque de 10 mil litros de una distribuidora de esa cuadra se rompió y tres operarios sufrieron lesiones de gravedad. El aire era irrespirable en la zona
Ocho personas sufrieron heridas, tres de ellas de gravedad, por la rotura de un tanque de cloro de una distribuidora de San Luis al 4400. El aire era irrespirable en la zona y la Guardia Urbana Municipal (GUM) recomendaba a los vecinos cerrar ventanas y no salir de sus casas, por el gas que emanaba el cloro derramado que dificultaba la respiración.
Los heridos que estaban graves sufrieron quemaduras, sobre todo en la zona de los ojos, y fueron trasladados al Mapaci, según le dijo al periodista Fernando Carrafiello, de Radio 2, una médica de emergencias que trabajaba en el lugar.
Los otros afectados tenían problemas respiratorios y traumatismos varios.
En el lugar había mucho olor. La cuadra estaba cerrada y se disponían a hidrolavar para que drenara el cloro derramado.
El tanque que se rompió, aparentemente porque cedió una pared, tenía diez mil litros de cloro, según trascendió.
Tras meses de denuncias por violencia laboral y hostigamiento, se concretó la salida del director Marcelo Minicucci. Vanesa Torres, delegada de ATE, destacó el triunfo de la lucha gremial y la llegada de la Dra. Carina Gres.
Una excavación ordenada por la Justicia Federal y realizada por un equipo especializado de antropología forense comenzó esta semana en la conocida “plaza del tanque” de Pueblo Esther. La actuación, informada por el municipio y explicada a este medio por la abogada Natalia Espíndola, se enmarca en una investigación por homicidio agravado con posible existencia de enterramientos clandestinos vinculados a delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.