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nubes dispersas
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Habrá que sobrevivir al martes, si nos disculpan el pesimismo. Es que los augurios del Servicio Meteorológico Nacional no son para nada alentadores: Lluvias, probables tormentas, pero nada de alivio, mucho y mucho calor.
La mínima rondará los 24 grados y la máxima, 34. Pero atención: Desde el SMN ya advierten que habrá una “elevada” sensación térmica. Y no es para menos, porque la lluvia estará lejos de traer algún alivio, manteniéndose las temperaturas muy altas de los últimos días.
Entre los chaparrones y las posibles tormentas habrá algunos mejoramientos temporarios, pero a no confiarse: llevar el paraguas a mano porque la lluvia insistirá. Y si el adminículo protector de las aguas es reforzado, mejor, porque el viento soplará del norte con regular intensidad y algunas ráfagas.
Para el resto de la semana, la cosa no mejora. Se mantendrá la inestabilidad y los pronósticos de lluvias, junto a temperaturas muy elevadas, que rozarán los 36 grados de máxima. Lo que se dice, un infierno.
