Un héroe rescató a un niño del interior de una casa en llamas

Un niño de 11 años de edad fue salvado de las llamas de un voraz incendio por un valiente joven que puso en riesgo su propia vida para rescatarlo. Este acto de heroísmo fue parte de un dramático siniestro que se vivió ayer por la tarde en barrio Unión cuando el fuego consumió por completo una humilde vivienda de chapa y maderas donde se encontraba el pequeño. Su abuela, quien lo tiene a su cargo, se había ausentado para ir a esperar que trajeran a su otro nieto desde Casa Verde, es un niño discapacitado a quien también está criando, en absoluta soledad porque enviudó recientemente.

“Estaba el nene, pero estaba durmiendo y dicen que lo sacaron por la ventana porque yo me fui a buscar el otro nene que viene de Casa Verde. Cuando estaba esperando me dicen. -¿Qué pasó en tu casa? y les dije que no sabía”, contó aun conmocionada por lo vivido Nélida Aidé a Diario EL SUR. La mujer remarcó que su nieto “se acostó a dormir y no sabe nada que es lo qué pasó”. El fuego fue devastador, terminó con la casa y consumió “todo, ropero, ropa, todo”, señaló Nélida mientras que una vecina acotaba desde atrás: “Lo importante es que el nene está bien”.

A la par de los bomberos voluntarios intentaban sofocar las últimas llamas del incendio, que se desató alrededor de las 17, el personal de Comando Radioeléctrico trataba de armar un cordón para impedir el paso de los curiosos. Personal de Defensa Civil, EPE y SIES, también trabajaban en el lugar ubicado al pie de la barranca, a medio camino entre la bajada a barrio Unión y Unión Sur. Sin saber cuál iba a ser su destino y antes que la asistiera una ambulancia, Nélida le comentó a Diario EL SUR que iría a la casa de uno de sus hijos en barrio Luzuriaga, mientras los vecinos señalaban la necesidad de recolectar ayuda dado que perdió todas sus pertenencias.

Marcelo David Rodríguez no lo pensó e ingresó a rescatar al pequeño de entre las llamas.

Heróico

El héroe inesperado de la tarde fue un joven de barrio Raviolo que se encontraba visitando a su hermana que vive en la parte superior de la barranca, sobre lo que alguna vez fue la casa de Nélida, ahora reducida a cenizas. “Vi que se prendió fuego, bajé y vi que el pibito estaba adentro. Lo saqué rápido aunque no quería salir porque estaba asustado. Lo saqué y después agarré las dos garrafas que fue lo único que pude y las saqué corriendo. Adentro ya no se podía estar, era el terrible el calor, pero sacar al pibito era más importante que yo”, expresó con humildad Marcelo David Rodríguez, de 32 años de edad.

Omar Cabrera, uno de los vecinos que llegó junto con Marcelo agregó que fueron ellos los que comenzaron a combatir las llamas utilizando baldes y el agua de una pileta que se encontraba en el patio. “Me avisó mi vecina que se estaba prendiendo fuego y vinimos corriendo, aparte una señora sola, la conocemos hace muchos años, pero no estaba y estaba el pibe en la ventana, estaba ahí adentro pero no quería salir porque le daba miedo. Decí que lo sacó él (Marcelo) y cuando lo sacó lo manotee y lo lleva corriendo para la calle”. Después, junto a otros vecinos, a baldazos enfrentaron las llamas hasta la llegada de los bomberos.