El Secretario de Producción y Desarrollo Económico del Municipio de Villa Constitución, Fernando Kunich habló sobre la complicada situación que atraviesan los agricultores y productores regionales.
Los productores y agricultores se enfrentan a la tercera campaña de conflicto debido a la sequía que azota a la región y que afecta la siembra y la cosecha de maíz, soja, trigo y legumbres. Frente a este panorama, el Secretario de Producción y Desarrollo Económico del Municipio de Villa Constitución, Fernando Kunich, confirmó que se declarará la emergencia con el objetivo de otorgar herramientas financieras para garantizar la continuidad del trabajo: “cuando pierden la cosecha no hay ingresos necesarios”, afirmó.
Dentro de la desolación que provoca esta crisis, llegaron algunas buenas noticias como paliativo a la incertidumbre: “Será cuestión de tiempo que se declare la emergencia agropecuaria y tanto la provincia como nación brindarán aportes con tasas blandas, con dos años y de plazo y seis meses de gracia a dieciocho cuotas con intereses bajos”, dijo Kunich.
Por otra parte, sostuvo que las lluvias del fin de semana pasado no cambiaron la realidad y que se esperan años de sequía en el mundo: “Los productores están esperando que llueva y ese es un recurso que no puede controlar nadie”, y agregó un poco de esperanza: “Hay un plazo entre 15 y 20 días, si llueve entre 60 y 100 milímetros, el productor va a tener el pie para volver a sembrar”.
En el departamento, 18 Comunas más la Municipalidad de Villa Constitución crearon la Agencia de Desarrollo del Departamento Constitución (ADECON) con el objetivo de facilitar los trámites de los afectados y que puedan recibir los fondos sin la necesidad de viajar a Rosario y Santa Fe: “Allí llegan los fondos que facilita el registro y la articulación puntual en cada caso”, indicó sobre la iniciativa que es presidida por Ariel Sahilices.
“Cuando se declara la emergencia, para poder acceder a los beneficios, el productor tiene que justificar que perdió el 70 por ciento de la siembra”, explicó y detalló que si el porcentaje abarca a más del 90, se trataría de una catástrofe agropecuaria: “A la mayoría no alcanza a cubrir los gastos que tuvo ni tampoco tiene una ganancia para poder sembrar para la campaña que viene”, cerró sobre el conflicto que atraviesan “las empresas a cielo abierto”, como las definió.