Un vecino del barrio Playa Mansa se presentó algo enfadado este jueves alrededor de las 11 de la mañana en la municipalidad. Llevó consigo dos bolsas cargadas de basura y, al parecer, alzando la voz; pidió hablar con alguna de las autoridades.
El hombre, finalmente logró ser atendido y fue recibido por el intendente Nizar Esper que escuchó sus reclamos y entonces tras esta breve charla se retiró del edificio municipal llevándose nuevamente las bolsas que había traido. Sin embargo, prometió regresar en una semana si no tenía respuestas concretas sobre sus quejas, las cuales están vinculadas a la prestación de los servicios en su barrio y a la falta de atención en la zona.