Llegó esta tarde, le dieron el alta médica en el Hospital Centenario de Rosario. El caso de Damián Delbono comenzó a ser conocido y público a principios de esta semana. Él mismo, desesperado, decidió salir en los medios para pedir ayuda urgente.
Oportunamente contó que hacía un mes atrás aproximadamente, había comenzado con dolencias “detrás de la nuca”, hizo consulta con el público y en el privado. Le encomendaron una resonancia magnética con contraste y él mismo llevó la orden con carácter de “urgente” para que el Centro de Salud “Ramón Carrillo” gestionara un turno en Rosario.
Sus dolencias continuaron y el lunes pasado consultó en el dispensario que estaba sucediendo con el trámite de gestión de turno y allí le informaron que “el papel” no estaba firmado aún porque la persona responsable por tal rúbrica, estaba de licencia.
No solo seguía con dolores, sino que le era imposible dominar un movimiento involuntario de su cabeza, el cual no le permitía dormir. Estaba angustiado, sin poder trabajar, sin atención y desesperado por conseguir quién lo asistiera.
Cuando el caso se hizo público, la esposa de Damián recibió una llamada, desde Salud Pública le dijeron que pase al día siguiente “por los galpones” de 9 de Julio y el Paseo Pedro Spina. Pero no había mucho más que esperar y fue un amigo – Daniel Gómez – el que decidió cargarlo en su auto y llevarlo directamente esa misma tarde del lunes al Hospital Centenario.
Desde ese momento quedó internado y en observación permanente. Le efectuaron la tan anhelada resonancia y “no tengo nada malo”, comentó hoy durante una nota para Extremo Diario.
El miércoles tendrá que iniciar un tratamiento, sus movimientos en la cabeza mermaron y está mucho mejor de ánimo. Aprovechó la entrevista para agradecer a toda la gente que haciéndose eco de lo que le estaba sucediendo, se contactó con él y con su familia. “Les doy las gracias a todos, no tengo palabras. Y acá también estoy dispuesto para ayudar, cuenten conmigo”.