Nuevamente la violencia dijo presente y el partido entre Central Argentino y Riberas del Paraná terminó con incidentes entre los jugadores y con la Policía. En el marco de las revanchas de los 4º de final de la Liga Regional del Sud, el partido, que debía ir al alargue, no pudo continuar y ahora será el Tribunal de Disciplina quién decida que sucederá con el resultado final. Hubo varios heridos de bala de goma.
Lamentable. Una vez más la Liga de Fútbol Regional del Sud deberá escribir una nueva página de su historia con sangre. Lo que debió haber sido una verdadera fiesta popular, con el color y el calor de un partido de fútbol, terminó con peleas, llanto, corridas y heridos de bala de goma.
El conflicto, que comenzó dentro del campo de juego entre los jugadores, se trasladó a la tribuna y terminó con la desigual pelea entre los efectivos policiales y el público visitante.
Todo comenzó cuando, con el tiempo recuperado cumplido, Central Argentino anotó el tercer gol y obligaba a jugar el alargue.
Allí, en pleno festejo del gol local, el arquero Tejerizo se trenzó con el banco de suplentes visitante y comenzó la gresca.
Entre el tumulto y la pelea entre los jugadores, el público visitante intentó ingresar al campo de juego y los efectivos policiales reprimieron con disparos de balas de goma.
Lamentablemente varias personas resultaron heridas y debieron ser atendidas en el Hospital de la ciudad.
Tras los incidentes, el árbitro del partido tomó la correcta decisión de suspender el encuentro y ahora quedará en manos del Tribunal de Disciplina.
El Comité Ejecutivo y el Triobunal de Disciplina de la Liga Regional se reunieron este lunes pdiendo los descargos de las dos instituciones y de la fuerza policial interviniente, del departamento Rosario.
El partido
Antes de los lamentables incidentes se jugó un partido de fútbol. En el encuentro de ida, Riberas se impuso por la mínima diferencia y viajó a Fighiera con la ilusión de mantener la diferencia.
En la vuelta, apenas comenzó el partido, el elenco dirigido por Luciano Castellarín logró ponerse en ventaja a través de un cabezazo de Juan Manuel Ciribé e igualó el tanteador global.
La Academia se volcó en busca de la igualdad y lo consiguió desde los doce pasos. Mariano Botti cambió el penal por gol y estampó el uno a uno.
Sin embargo el Lobo también contó con un penal a favor y Jesús Lasca lo cambió por gol.
Sobre el epílogo del primer tiempo, Diego Fuentes volvió a empardar el marcador y la Academia se ilusionaba con el pasaje a la semifinal.
Tras disputarse todo el complemento, el árbitro adicionó 5 minutos. Sobre el final del recupero, Fernando Martínez marcó el 3 a 2 y resucitó las ilusiones de Central Argentino.
Lamentablemente, en el festejo del gol comenzaron los disturbios y el encuentro no pudo continuar.
Resumen 4º de final
Domingo
Central Argentino 3 Riberas del Paraná 2
Goles: Juan Ciribé, Jesús Lasca, Fernando Martínez (CA); Mariano Botti, Diego Fuentes (RP)
Terna arbitral: Damián Ferreyra, Jorge Hernández y Marcos Yone
Expulsados: No hubo
Cancha: Central Argentino de Fighiera
Global: Central Argentino 3 – Riberas 3
El testimonio
Juan Cruz Ceremelle: “Reprimieron sin piedad”
Impotencia. Bronca. Abuso. Esos son algunos de los adjetivos que utilizó Juan Cruz Ceremelle para describir sus sensaciones. Sus sentimientos.
El “Monito”, actual jugador de Riberas, se encuentra con una lesión muscular y por eso decidió apoyar desde la tribuna a sus compañeros. Jamás imaginó lo que iba a suceder.
Ya más tranquilo, con la serenidad que brinda estar en su hogar con su familia, Ceremelle le abrió las puertas de su casa a Tribuna Sur para contar, con lujo de detalle, lo sucedido: “Para mí el festejo del arquero de Fighiera estuvo demás en dedicárselo a la gente de Riberas. Ahí se fue todo de las manos. La verdad que estuvimos mal todos, la gente, los jugadores y la Policía.
Igualmente la Policía no tendría que haber reprimido como reprimió porque había mujeres, nenitos, gente que no quería estar en los incidentes y reprimieron sin piedad”.
Al mismo tiempo, Juan Cruz resaltó que se respiraba mucho miedo en la tribuna de Riberas ya que “la Policía no paraba de disparar” sin importar a quien.
“Te da mucha impotencia que sean tan gatillo fácil. Hubo más de diez heridos y el que menos balazos recibió debe tener por lo menos cuatro. Yo tengo veinte”, resaltó.
Sobre los hechos, Ceremelle aseguró que en ningún momento la fuerza quiso calmar la situación y no les interesó tomar el control de la situación.
“La gente también es cómplice de las actitudes de la Policía. No nos callamos nunca, teniendo o no razón. Ante un momento así de impotencia, en donde estábamos muy cerca de clasificar, se podría haber actuado de otra manera”, contó y en relación a la decisión que deberá tomar la Liga manifestó que espera que sea la correcta y que sea para el bien de todos.
“Somos todos personas y esto no deja de ser un juego. Que se llegue a estos extremos es inentendible. Acá la culpa la tenemos todos, esa balacera fue un desastre. Tengo mucha bronca, mucha impotencia. No aguanto más.
La Policía actuó mal. Se tendrían que mostrar con más sentimientos. Por más que tengan el uniforme, y la prioridad de querer parar el quilombo, eso no justifica que te traten como un animal y que te tiren tiros como a animales.
No paraban de tirar tiros, era una locura. No les importaba si había chicos, si te apuntaban y te arrancaban un ojo.
Hay que empezar a tomar las medidas que se tienen que tomar. Si queremos cambiar las cosas hay que tomar las medidas correctas, ya sea dejando afuera a los equipos o sacando puntos a los que hagan el problema. Necesitamos que se calmen un poco las aguas”, finalizó el “Monito” Ceremelle.