Donde funciona el merendero "Copa de Leche" y el dispositivo barrial "El Galponcito", en la intersección de los barrios San Francisco y Virgen del Lujan, la secretaría de Salud y Desarrollo Social que encabeza Mariano Athie y Natalia Spadoni decidió no reponer el servicio de internet y wi-fi para el espacio. Inicialmente la red se dañó, pero ante las consultas para repararla, el Estado local decidió sacar el abastecimiento definitivamente, cortando un insumo importante no sólo para el trabajo de las docentes y profesionales que allí asisten, sino también para los vecinos que solían utilizarlo para tener conectividad, con lo importante que esto es en la actualidad.
"Nosotros somos pueblo", dijo varias veces el Intendente Daniel Tonelli, queriendo maquillar una gestión que lejísimo está de ser pueblo. Porque ser pueblo, se es con los humildes, con los que menos tienen. Y este gobierno le esquiva a quienes necesitan imperiosamente de la ayuda del Estado en situaciones de emergencias. Y mucho tiene que ver la secretaría de Salud y Desarrollo Social, que comandan el Dr. Mariano Athie y la directora Natalia Spadoni, que parecen haber perdido la memoria sobre este concepto tan importante y ante una tarea tan trascendental para un gobierno, como lo es, estar con quienes lo precisan. Desde el Sindicato de Trabajadores Municipales, y fuentes cercanas, destaparon un nuevo suceso: En el merendero "Copa de Leche", donde también funciona el dispositivo barrial "El Galponcito", situado en los barrios San Francisco y Virgen del Luján, el Estado municipal, la gestión de Tonelli, le quitó al lugar el servicio de internet y wi-fi.
Según expusieron, la red funcionaba defectuosamente hasta que un día dejó de andar por completo, y desde el gobierno local se decidió quitarlo, en vez de repararlo. El SITRAM, y también personas allegadas, confirmaron a este medio que en varias oportunidades el dispositivo solicitó a varios funcionarios que vuelvan a instalar internet y por consiguiente la red wi-fi, ya que era sumamente necesaria no sólo para el trabajo que realizan en "El Galponcito" las profesionales, sino también para el uso comunitario que le daban las familias del barrio, ya sea para trámites online, tareas escolares, etc.
Ante el pedido de reparación, la gestión de Daniel Tonelli dijo no, pero no por un tiempo, sino un no para siempre. Es decir, que no se volverá a colocar internet en ese sector, con lo importante que es en la vida de las personas e, incluso, en el trabajo, para la conectividad y resolución de múltiples funciones o problemáticas diarias.
Esta es una medida anti - pueblo, de un gobierno que recortó un insumo hoy fundamental, que para el Estado es barato; y que, por otro lado, sigue contratando gente cercana y dándole puestos de jerarquía a un gabinete que no para de crecer. Este gobierno, no es ni será pueblo, porque fuerza una actitud que no le sale, olvidando incluso las raíces de varios de sus funcionarios, raíces que crecieron en barrios que hoy, en gran medida, por ellos mismos, son olvidados...
El gobierno local celebró el "Día de la Persona Mayor", pero no fueron más de 30 personas, ya que no cursó invitaciones para los dos centros de jubilados que hay en la ciudad. Organizada por Luciano Martín, a la actividad le faltó impulso y convocatoria que, claramente, parece haber sido selectiva. Nada que ver a lo que fueron los encuentros en General Lagos y Pavón, donde nuestros jubilados sí recibieron invitaciones como corresponde.
Personal de Parques y Paseos realizó una jornada de paro de actividades la semana pasada, en reclamo por la falta de indumentaria para trabajar. Esta área dentro de la secretaría de Obras y Servicios Públicos, está a cargo de Julián Cardo, quien al averiguar el paradero de la indumentaria para destrabar la situación, se dio cuenta que la tenía en su poder Cristian Rojas y nunca la había entregando, generando agrede este conflicto para perjudicar el funcionamiento del este sector que coordina su compañero de gabinete.
La profesional venía reclamando un cargo de provincia desde hacía años o en su defecto un aumento de salario justo, pedido que esta gestión nunca escuchó y hasta ignoró. Ni el director del Hospital N°50, Aníbal Ramos, ni el secretario de Salud, Mariano Athie, abordaron la situación y la ecógrafa del efector renunció porque veía más conveniente prestar el servicio en el privado. Quien terminó resolviendo la problemática fue Carina Gres, que logró derivaciones de más de 50 embarazadas para que puedan continuar con su control. Lo ilógico es que pregonaron el "Mes Rosa" pero la ecógrafa renunció justo en octubre...