La ouija o güija es un popular “juego” mediante el cual supuestamente se puede comunicar con los espíritus del mas allá. Veamos como practicar la güija sin correr demasiados riesgos innecesarios.
La ouija o güija es un popular “juego” mediante el cual supuestamente se puede comunicar con los espíritus del mas allá. Para ello solo es necesario un tablero con las letras del abecedario inscritas. Esto significa que es muy fácil convertirse en practicante. Tanta es la facilidad de romper las barreras de la realidad, de sumergirnos en una dimensión que no nos pertenece, que esta practica se convierte en peligrosa para ciertas personas y en ciertas circunstancias. Así que veamos como practicar la güija sin correr demasiados riesgos innecesarios.
Existen diferentes tipos de motivaciones por las cuales una persona se decide a probar este juego:
La primera y la más común es la curiosidad. Las personas que se sumergen en este viaje y llevan consigo la curiosidad solo intentan descubrir si aquellas historias que se contaban alrededor de un gran fuego en aquel campamento de verano son ciertas. En este primer grupo de motivaciones vemos como los interesados dejan de practicar con la güija después de cortos periodos de tiempo ya sea por que han encontrado una respuesta a su pregunta fundamental o las experiencias ya no son novedosas.
La segunda y quizás la más poderosa de las motivaciones es la necesidad de seguir en contacto con los seres queridos que ya no se encuentren en el plano físico. Esta también es la más peligrosa ya que los practicantes depositan sentimientos y pensamientos muy fuertes y muy poderosos en la sesión. Ante esta situación se debe mantener la calma e interrumpir la sesión si no se pueden controlar los sentimientos.
La ultima de las motivaciones que hemos seleccionado es la investigación o estudio. Esto puede ser tanto desde un punto de vista parapsicológico, transcendentalista, espiritual, como incluso extraterrestre. Los practicantes investigadores intentan encontrar algún tipo de evidencia o prueba de que es posible contactar con otros mundos mediante este método.
Si usted desea practicar con la güija debe tener muy claro que tipo de motivación le a llevado a interesarse por este método de comunicación. Aun teniendo muy claro el primer punto no es recomendable la practica de este “juego” a personas con tendencias extremistas, ya sean políticas o sociales. Tampoco se recomiendo la practica a personas que busquen una respuesta con ansiedad por el tema comentado anteriormente de los sentimientos y la energía que se deposita sobre la sesión. Ahora unos consejos sobre la practica:
Al realizar la sesión se debe estar calmado y concentrado, y para eso es recomendable una meditación antes de la practica.
El miedo también es uno de esos sentimientos que afectan negativamente,por eso se debe cortar la sesión en cuanto se detecte el mínimo indicio de miedo en cualquiera de los practicantes, y esto nos lleva al siguiente punto.
Las practicas se deben realizar en grupos de al menos tres personas.
La sesión ouija debe realizarse en un lugar tranquilo en el que no hayan demasiados ruidos ni demasiada luz, pero tampoco es preciso a la luz de las velas, ni darle un tono fantasmagórico.
No se deben cruzar ni brazos ni piernas durante la totalidad del proceso por los bloqueos que se puedan ocasionar en el campo energético.
En el proceso de iniciación de la practica los integrantes del grupo deben tener claro que la experiencia debe ser positiva,para ellos se puede recitar en voz alta: Esta practica sera positiva para mi y para mis compañeros.
Se debe expulsar cualquier pensamiento relacionado con la muerte, cementerios, películas de miedo o de ciencia ficción dado que estos pensamientos podrían afectar negativamente la sesión.
Es recomendable colocar el dedo índice o corazón sobre el master, la mano con que se realice la practica no tiene importancia.
No preguntar si la presencia es de naturaleza buena o mala, positiva o negativa.
No preguntar por el espíritu o alma de alguien, ya sea conocido o desconocido ya que se podría desencadenar un apego por parte del espíritu o espíritus hacia la persona que ha realizado dicha pregunta.No adjudicar a la presencia una personalidad divina o demoníaca.
La interpretación del mensaje que se reciba no es fácil. En algunos casos puede ser exactamente lo que se ha recibido pero en otros el mensaje podría ser todo lo contrario. Quizás este es el mayor peligro de este “juego”. En cualquier caso no se debe obsesionar ni con el mensaje ni con la practica.
Tan extendido temor parece estar relacionado con creencias religiosas, mitológicas y leyendas históricas.
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