A las cinco de la mañana del jueves cerca de 150 efectivos de distintas unidades regionales del sur provincial se reunieron en la Jefatura local. Media hora después comenzaron el llamado operativo "A-012".
El ministro Raúl Lamberto y el jefe de policía provincial, Omar Odriozola, ante los elementos incautados.
Rosario.- Fueron 12 allanamientos en diferentes barrios de la ciudad y en los que se secuestraron dos vehículos, cinco armas de fuego, más de 20 celulares, proyectiles de todo tipo y una inmensa cantidad de objetos robados en viviendas de distintas poblaciones. Además, hubo ocho detenidos (5 hombres y 3 mujeres de entre 22 y 50 años) para desbaratar una superbanda que durante el año 2013 cometió al menos 50 atracos y salideras bancarias.En uno de los salones de la Jefatura de la Unidad Regional II se vivía ayer la euforia del deber cumplido. El ministro de Seguridad, Raúl Lamberto; el jefe de la policía provincial, Omar Odriozola; el jefe de la Unidad Regional II, Luis Bruschi; el jefe de Orden Público de la Unidad Regional XVII de San Lorenzo, Daniel Corbellini; el fiscal de Cámara Guillermo Camporini y una serie de fiscales, jueces, comisarios y efectivos de comisarías de los pueblos donde ocurrieron los hechos mostraron orgullosos los resultados del operativo "Fue un trabajo de seis meses en los que merced a la coordinación de las distintas unidades y con el apoyo de la Justicia se pudo desbaratar la banda. Se tomó la decisión de esclarecer los hechos y se logró. Este es el inicio del fin de esta banda ya que se sigue trabajando", disparó muy seguro el ministro Lamberto.
El inicio. En un palco preparado para la ocasión se dispusieron los objetos recuperados, las armas secuestradas, dos chalecos antibalas, celulares y tres handys que la banda usaba para interceptar la frecuencia policial. En la puerta quedaron la camioneta Ford Ranger y el Peugeot 307 que usaban los maleantes que conformaban un grupo "particularmente cruel", según el comisario Corbellini en cuanto al accionar de los ladrones. Y agregó que "desde la Unidad Regional XVII comenzamos un trabajo por el cual se pudieron intervenir ocho celulares de los cuales se interceptaron 9 mil llamados y de allí fuímos cercando a la banda".
"Se hizo un trabajo titánico. Transmitimos una idea de trabajo al Ministerio Público Fiscal y pese a que aún hay mucho para esclarecer, sabemos que se van a lograr más resultados porque tenemos en carpeta allanamientos en provincias vecinas", argumentó Corbellini.
Como muestra del operativo, un efectivo de la Unidad Regional IV (departamento Caseros) con asiento en Casilda, sostuvo que suss hombres participaron de cinco allanamientos en el barrio La Lagunita, en el oeste rosarino, buscando a los delincuentes que en su ciudad "hicieron un robo muy grande".
Cada unidad regional trabajó coordinadamente y eso llamó la atención del fiscal Camporini, quien no dudo en expresar: "Cuando vino a verme el comisario Corbellini pensé que este operativo iba a fracasar, no daba dos pesos por el trabajo. Sin embrago cada punto fue coordinado y se pudo lograr". A la hora de que las víctimas puedan recuperar los objetos robados, el juez de Instrucción Javier Beltramone sostuvo que "se tramitará en cada juzgado" donde estén registradas las causas.
Por los barrios. Las localidades en las que la banda actuó fueron varias, pero los allanamientos y las detenciones se hicieron sólo en Rosario. Más precisamente en los barrios Ludueña, Emplame Graneros, Itatí, 7 de Septiembre, Godoy y La lagunita. "A partir de las llamadas interceptadas su pudo dar con cada uno de los integrantes de la banda", dijo Corbellini. Y los pesquisas hasta lograron descifrar que "a partir de un problema entre los integrantes de la banda, el grupo inicial se dividió en dos. Mientras una parte seguía con robos a viviendas y chacras, otros se focalizaron en robos en Rosario entre las cuales habría al menos un par de salideras bancarias".
Sólo algunos de los detenidos fueron identificados ayer por la policía. Se trata de Cristian P., David G., Verónica M., Raúl R. y María C., además de un hombre apodado "Jujeño". Varios de ellos tienen prontuarios por robos y pedidos de captura en distintos juzgados.
Al cerrar la noche los investigadores seguían trabajando a partir de nuevas órdenes de allanamiento y prometían: "Tal vez nos asombremos cuando lleguemos al fondo, a los jefes de la banda".
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló
Lo halló la Policía de Investigaciones tras allanamientos que realizó en la noche de este jueves en Puerto General San Martín, donde había sido secuestrado un 308 gris que se presume que tendría relación con la desaparición de la joven de 20 años que había sido vista por última vez el 30 de octubre.