Desde una moto en movimiento, dos hombres amenazaron a un automovilista con una escopeta. El hombre intentó esquivarlos pero los chocó, presuntamente, por accidente. Ambos terminaron golpeados, uno de ellos con una pierna fracturada.
Rosario.- Mientras los vecinos de barrio Parque disfrutaban de una larga sobremesa por el Día de la Madre o preparaban el mate para las facturas de la tarde, muchos detuvieron los festejos en seco al escuchar disparos seguidos de un fuerte ruido. Dos hombres en moto habían intentado detener la marcha de un hombre que se desplazaba, a su vez, en un auto y terminaron en el hospital. Su víctima pegó un volantazo para esquivarlos y terminó por chocarlos. Uno de ellos se fracturó una pierna.
Según fuentes policiales, el hecho ocurrió este domingo alrededor de las 17.30 en Rueda y Riccheri.
Dos hombres que se desplazaban en moto apuntaron al conductor de una traffic color rojo con una escopeta y efectuaron algunos disparos de advertencia, de acuerdo al aporte de testigos.
La víctima, asustada, hizo una maniobra que colisionó a ambos ladrones. La moto quedó bajo la traffic y sus dos ocupantes tendidos sobre el asfalto a los pocos metros.
Ambos fueron identificados y terminaron detenidos: Emanuel G., de 29 años; y Joel A., de 20. Uno de ellos terminó con la pierna derecha fracturada.
Cinco mujeres fueron demoradas al ser descubiertas con cocaína y marihuana ocultas en su calzado. Utilizaban un método sofisticado para burlar los controles. Algunas tienen vínculos con presos relacionados al narcotráfico.
El choque ocurrió pasadas las 22 cuando la víctima de 33 años caminaba por la zona de Avellaneda y colectora de Circunvalación y fue embestida por un Renault 9. El conductor se retiró del lugar y se presentó a la medianoche en dependencia policial.
El ataque ocurrió el sábado en un asentamiento ubicado en Crespo y Granadero a caballo. La víctima fue trasladada al hospital de niños Zona Norte de Rosario
El robo tuvo lugar el pasado sábado en las afueras de Rosario. Los delincuentes se llevaron celulares, dinero, una computadora, una consola de videojuegos y el DVR de las cámaras de seguridad.
Tras el crimen, la policía allanó un bunker al que habrían ido las víctimas y arrestó a cuatro sospechosos. La pareja de uno de los fallecidos declaró que los agresores le dijeron que fue una venganza