Mataron a su hermano, usurparon su casa y murió su beba. Y la balearon.
Hace seis meses Carolina se quedó sin casa. Después de que asesinaran a su hermano en una de las zonas más pobres de Ludueña, tuvo que irse con su familia por las amenazas de los asesinos. Su casa fue ocupada por vecinos que la pusieron en venta y los problemas no demoraron en crecer. Las denuncias en la comisaría y Fiscalía no tuvieron respuesta alguna y los cruces con los sindicados usurpadores fueron cada vez más violentos. El límite llegó anteayer al mediodía cuando caminaba a comprar yogurt para sus hijos y una mujer de la familia que ocupó su vivienda le disparó en medio de la calle. Carolina recibió dos de los ocho disparos que escuchó y quedó internada en el Hospital de Emergencias en grave estado. Según los vecinos, la autora de los tiros había intentado agredir a una maestra en la escuela minutos antes de dispararle a Carolina.
La madrugada del lunes 5 de octubre Mario Nahuel Godoy, un adolescente de 15 años, fue asesinado de una puñalada en el estómago. El crimen ocurrió ante los ojos su hermana, Carolina Del V. de 25 años, en la zona de Barra y las vías y fue perpetrado en el marco de las disputas entre dos bandas de Ludueña: los del Bronx y los T., en referencia al apellido de una familia.
Según vecinos, esa noche los dos bandos habían peleado y Mario junto con un amigo fue acusado por los del Bronx de “zapatear” para los T. Su amigo fue alcanzado por los muchachos que empezaron a pegarle y Mario corrió a buscar a su hermana por ayuda.
Según contó la propia Carolina, cuando llegaron al lugar apareció un hombre apodado Tito y lo apuñaló. Mario fue llevado al Heca, donde murió poco después de su ingreso.
Después del crimen, Carolina se fue del barrio junto con su marido, sus hijos y un embarazo de pocos meses. Apenas abandonaron la zona, su casa fue ocupada por una familia que la puso en venta. A partir de ahí, empezaron meses de conflicto entre Carolina, sus hermanas y este grupo de vecinos con denuncias en la comisaría 12ª y en Fiscalía que no llegaron a ningún lado y amenazas cruzadas constantes.
Hace tres días, la beba de un mes de Carolina falleció de muerte súbita. Destruida por la pérdida, la joven volvió a la casa de su madre. Anteayer, salió al mediodía a comprar yogurt para sus hijos y en Magallanes y Tupac Amaru se cruzó con Yanina S., la mujer que le había sacado su casa, y su marido, apodado Pelado Capo. Según contó la víctima, Yanina se sacó un arma de los pechos y le disparó a Carolina, mientras el Pelado se escondía detrás de un auto. Carolina recibió dos disparos en el lado izquierdo del abdomen y el tórax que le afectaron varios órganos. Fue llevada al Heca, donde quedó internada en grave estado.
Según el relato de vecinos, un rato antes de los disparos Yanina junto a su pareja habían ido a la puerta de la escuela del barrio a amenazar a una maestra, por un problema con el hijo de ambos. La mujer estaba armada y dispuesta a disparar, pero en la escuela cerraron todas las puertas y la pareja se fue. Al regreso, Carolina se cruzó en su camino.
Fue encontrado este viernes en horas del mediodía por empleados de la planta del Centro Ambiental de Tratamiento de Residuos, en Las Palmeras y Uriburu. Según el dictamen del médico policial, se trataba de un niño nacido a término, con una data de muerte de entre 12 y 24 horas
Se trata de un vecino de la localidad de Alvear que al ser allanado se resistió y rozó de bala a un policía. La fiscalía sospecha que desvió gran parte de su armamento en forma ilícita, en una maniobra similar a otras ya detectadas en una causa por “compras de paja” o prestanombres
Ocurrió este miércoles en las afueras de Capitán Bermúdez. La víctima logró llamar al 911 desde el interior del vehículo. Investigan una nota intimidatoria para la ministra de Seguridad, que planea llegar a la región para quemar cocaína incautada.
Un cadáver fue encontrado en el agua cerca de la ruta a Victoria y luego confirmaron que se trata de uno de los hombres buscados desde el último sábado. Al otro cuerpo lo divisó un pescador cuando navegaba por un brazo del Paraná frente a la costa de Fighiera.