La medida fue consensuada con el gremio y se tomó por la caída de ventas en el mercado interno. Afecta a trabajadores de la acería bajo dos modalidades. Gestiones ante los ministerios de Trabajo y Economía de la provincia.
La compañía siderúrgica Acindar decidió suspender por diez días al personal de la acería en la vecina ciudad de Villa Constitución, una medida que se ya se había tomado en el último mes.
La decisión fue consensuada con el gremio, la Unión Obrera Metalúrgica (UMO), y se tomó para intentar paliar la fuerte caída en las ventas en los mercados de la construcción y metalmecánico, tanto a nivel local como en Brasil, informa en su web El Ciudadano.
La suspensión se lleva a cabo con dos modalidades: los trabajadores que con licencia por tomar comenzaron a hacer uso de ese beneficio, mientras que el resto del sector fue suspendido con la garantía de cobrar el 85 por ciento del salario neto por cada día no trabajado.
La medida afecta a entre 200 y 250 trabajadores de la acería y casi 60 que cumplen tareas complementarias, agregaron desde la compañía, que además de Villa Constitución produce acero para la industria, el campo y la construcción en sus plantas de Tablada, San Nicolás (Buenos Aires), Villa Mercedes (San Luis) y Rosario.
Gestiones a nivel oficial
A raíz del conflicto por el que atraviesan actualmente las empresas metalúrgicas de Villa Constitución, el presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Luis Rubeo, se reunió esta semana en dicha localidad con representantes gremiales y autoridades locales, entre ellos el intendente.
“Analizamos la situación que se está viviendo particularmente en Acindar y asumimos el compromiso de discutir el tema con los ministros de Trabajo y Economía de la provincia para definir de qué forma podemos colaborar con el objetivo de sostener las fuentes de trabajo y la actividad productiva”, expresó Rubeo.
La medida de fuerza, en todas las plantas del país, comenzó al mediodía del lunes, luego de que la Cámara de Diputados obtuviera quórum para debatir la nueva Ley Bases. Concretamente, los trabajadores aceiteros se oponen a la reforma laboral y a la restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias.
El gobernador se refirió a los trece autos incendiados, el taxi baleado y las amenazas a colectiveros. “Ante estos ataques es muy difícil que el Estado se pueda adelantar. Pero trabajamos, ponemos recursos a disposición y aseguramos que los responsables siempre terminan cayendo”, sostuvo